El parque Bicentenario es uno de los lugares con mayor concurrencia de ciclistas en Quito. Foto: Vicente Costales / archivo / EL COMERCIO
El uso de bicicleta en el país sigue en alza, pese a un ligero descenso del último año. Tanto para la ruta como el ciclismo de montaña, la actividad deportiva y recreativa está en ascenso.
Según el Servicio de Rentas Internas (SRI), entre agosto del 2015 y septiembre del 2016, la venta de bicicletas en el país generó ingresos por USD 95 969 686. En el 2017, esa cifra se incrementó a UD 124 466 374, mientras que este año sufrió un descenso a USD 103 319 100.
En Quito hay varios escenarios naturales donde pedalear. El Parque Metropolitano del Sur, el más grande de nuestra ciudad, cuenta con caminos abiertos empedrados, de tierra y césped, ideales para el ciclismo de montaña. Las altitudes van desde 2 700 metros hasta los 3 150 m. Hay circuitos de hasta 15 km para los más experimentados, y rutas planas y sin mayores complicaciones para los principiantes.
En las faldas del Pichincha existe una ruta muy poco conocida, pero con extraordinarios paisajes. Se pueden realizar recorrido, para todos los niveles y por caminos empedrados, senderos en páramo y bosque andino. Se pueden diseñar rutas de hasta 32 kilómetros desde el Parque Metropolitano de Chilibulo a la altura del Cinto.
Un escenario para principiantes es el Parque Metropolitano Itchimbía, en pleno centro de la ciudad. En su pista de 3 kilómetros se pueden diseñar cuatro circuitos, de acuerdo al nivel de experiencia y edad. Es ideal para la práctica de los niños.
Dos ciclistas en una de las rutas del parque Metropolitano Guanguiltagua. Foto: Archivo / EL COMERCIO
El parque Metropolitano Guanguiltagua se ha convertido en un escenario para la práctica diaria, pero también para los torneos locales y nacionales, por sus condiciones técnicas. Según los expertos, este escenario tiene características que exige la Unión Ciclística Internacional (UCI) para pruebas de ciclismo de montaña, en la categoría Cross Olímpico, única modalidad en la agenda de Juegos Olímpicos.
Al parque Bicentenario y a La Carolina acuden ciclistas montañeros y ruteros. En el primero, se aprovecha su terreno asfaltado para el entrenamiento y práctica del ciclismo de ruta. Otros lugares de mucha concurrencia son el Chaquiñán, que une Cumbayá con Puembo, y los Senderos de Lloa para los montañistas.
También están las ciclovías habilitadas por la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop). Los datos de esta organización muestran que, al momento, hay 32 kilómetros nuevos de ciclovías que se sumaron a los 14 kilómetros que existían en Quito.
Según datos oficiales, ha 32 kilómetros nuevos de ciclovías en Quito. Foto: Eduardo Teran Urresta / EL COMERCIO
Grupos organizados que salen a ciclear
Los clubes y grupos de ciclismo de ruta organizan salidas periódicas para pedalear por la ciudad en horario nocturno. En objetivo es ir por lugares de la ciudad con poco acceso para recorrerlos en bicicleta durante el día. Además, en grupo, la seguridad es mayor para todos los participantes en la salida.
Estos ciclopaseos incluyen recorridos desde el norte de Quito al Panecillo o al Centro Histórico, por ejemplo. Otras alternativas son los recorridos a los valles y cantones cercanos como la cicloruta a Guayllabamba. Los ruteros se alistan cada año para la caravana Quito-Ibarra-Tulcán que organizan los tulcaneños residentes en la capital.
Muy cerca de Quito, en el sector de Pedro Vicente Maldonado, es una tradición la travesía Tucan, donde se compite en las modalidades Cross Country y Maratón. En el circuito de 65 km y 35km, se alterna superficie de asfalto y montaña.
Hay competencias de MTB (ciclomontañismo) en Cayambe, donde los ciclistas ascienden hasta los 4 700 metros de altitud con distancias de 25 km y 14 km. También está la vuelta del Cotopaxi que dura dos días.