Bella Paredes se entrena en el gimnasio de Fedeguayas. Esta semana hará un campamento de práctica en Manabí. Enrique Pesantes / EL COMERCIO
Bella Paredes se despidió de las competiciones panamericanas prejuveniles como triple campeona. La pesista ascenderá a la categoría juvenil, el próximo año, por lo que se propuso conseguir todas las medallas posibles durante la transición.
La deportista fue la mejor del Panamericano en la división de 76 kg, con marcas de 95 kg en arranque, 116 kg en envión y 211 kg en el total, en agosto pasado en Guayaquil.
“Tenía que revalidar el campeonato que conseguí el año pasado, en Colombia. En enero dejaré las competencias prejuveniles y quiero irme como la mejor. La idea es ubicarme entre las exponentes más fuertes en este ascenso”, dijo la deportista de 17 años.
Paredes es hiperactiva, le gusta conversar y bromear con sus compañeros. Cuando llega al gimnasio de la Federación Deportiva del Guayas (Fedeguayas), donde se entrena diariamente, se termina el silencio. Lleva consigo un parlante inalámbrico en el que escucha música para amenizar el ambiente.
Sueña con ser la mejor exponente del deporte en su categoría. Su participación en los Juegos Olímpicos de la Juventud de Argentina, el año pasado, fue un impulso. Terminó en el cuarto puesto y sintió que tenía que superarse.
“Quedé lejos, pero sentí que podía dar más. Este año las volví a enfrentar en el Mundial de Las Vegas, gané tres medallas de bronce y ellas solo me ganaron por 2 o 3 kilos. Siento que estoy por buen camino”, dijo la deportista de Babahoyo.
Desde su participación en los Juegos Olímpicos de la Juventud ha mejorado sus marcas (5 kg más en arranque y 3 kg más en envión), según registros que lleva con su entrenador, el cubano Modesto Sánchez.
Esta semana iniciará un campamento de entrenamiento en Portoviejo, Manabí, como preparación para el Sudamericano, que se hará en Argentina en diciembre. Esa será su última competición prejuvenil.
Cuenta que la transición la tiene sin cuidado. Ya ha competido en torneos juveniles, como prueba. Sin embargo, reconoce que este cambio definitivo conllevará la exigencia de sumar medallas. Su primera competencia será en marzo, en el Mundial de Egipto.
“Voy paso a paso, dándole la misma importancia a todas las competencias, no me enfoco en una sola ni veo mucho al futuro. Si es un selectivo en Guayas me motiva y me pone igual de nerviosa que estar en un Mundial”, dijo.
Debido a su rendimiento, Bella se apunta como el recambio generacional en la selección ecuatoriana de halterofilia. Ha entrenado junto a Neisy Dajomes, Jorge Arroyo, Alexandra Escobar, Tamara Salazar…
Reconoce que no tiene una relación estrecha con ninguno. Con quien más conversa es con Alexandra Escobar, la esmeraldeña suele corregir su técnica y darle consejos durante los entrenamientos.
“A lo mejor (la poca cercanía) es por la edad o porque todos nos enfocamos en nuestros entrenamientos, este deporte es individual. Pero más allá de eso, todos son muy cordiales y profesionales”, dijo, cuando se le consultó sobre los pesistas más experimentados.
Evita presionarse ante los éxitos de sus compañeros mayores. Para ella, cada vez que un deportista ecuatoriano –de cualquier disciplina– gana una medalla, el nombre de Ecuador toma mayor fuerza y eso beneficia a todos los atletas.
Cuando no está en el gimnasio disfruta de escuchar música y sale con sus amigos del colegio de Fedeguayas, donde se graduará este año.
Tiene un canal de Youtube, en el que sube videos de sus participaciones y otros cantando. “A lo mejor algún día me hago famosa”, dijo entre risas la pesista.
Biografía. Nació en Babahoyo, el 25 de febrero del 2002. Tiene 17 años.
Experiencia. Compitió en gimnasia hasta el 2015, cuando decidió cambiarse a la halterofilia. Como pesista registra títulos sudamericanos y panamericanos prejuveniles. Partició en los JJ.OO. de la Juventud 2018.