El único que nos puede quitar la libertad es Dios. Siendo libres podemos opinar de lo que creemos favorable o perjudicialmente, podemos hacer públicos nuestros sueños y anhelos.
Con libertad podemos entrenar sin restricciones, procurando hacer realidad nuestros objetivos y proyectos. Para los deportistas es fundamental la libertad porque así podemos obtener mejores resultados dentro y fuera del país.
Podemos caer y levantarnos, pero con libertad podemos superar cualquier adversidad. Gracias a ella pude decidir mi carrera de deportista, sin descuidar mis estudios. Es un orgullo que pocas personas tenemos de representar al Ecuador.
Siempre he tenido la libertad de expresarme sin ataduras ante mis superiores.
En el caso del deporte, mis actividades las hago en coordinación con los entrenadores y dirigentes. Tomo las debidas precauciones cuando emito un criterio para no afectar a nadie. A veces sin querer, por la libertad que se tiene, se puede herir a otras personas.