José Saant, con la faja como campeón sudamericano en el peso gallo. Foto: Cortesía
José Saant se planteó un nuevo objetivo tras la obtención del título sudamericano, en la división de 118 libras, peso gallo. El pugilista shuar de 28 años gestiona ahora los recursos económicos necesarios para disputar el título latinoamericano.
El 20 de abril del 2018, cerca de 2000 espectadores fueron testigos de su triunfo ante el venezolano Renzo Robles y la consecución de la faja como campeón sudamericano. Quedaron pequeñas las instalaciones del coliseo de la parroquia Sevilla Don Bosco, en Morona Santiago. Hubo personas que miraron de pie los 10 asaltos.
Raúl Saant, su hermano y mánager, contó que los dos organizaron la velada boxística con el apoyo de las autoridades de la provincia. “Se demostró que existe gran afición por el deporte de los puños; además se constató el enorme aprecio que la gente shuar y mestiza tiene para mi hermano”.
Según Raúl, quien también fue seleccionado provincial de boxeo por cuatro años, comentó que decidió ser mánager de su familiar porque los empresarios o representantes lo que primero que piden es dinero. “Yo quiero verlo triunfar porque es un gran pugilista”. Él es auxiliar de seguridad en un hospital público de Macas.
Ambos se plantearon organizar para noviembre de este año una nueva cartelera boxística en el cantón Gualaquiza, con motivo de las fiestas de la provincia. El adversario para ese combate está por definirse.
Para el próximo 21 de julio está concretada la pelea con el boliviano Miguel Ángel Canido, cuyo objetivo es escalar en el ranking mundial. En la actualidad se ubica entre los 40 mejores en peso gallo del Consejo Mundial de Boxeo. Entre el 10 y 12 de agosto peleará en Gualaquiza con el mexicano Jonathan Padilla.
Para su viaje y participación en Perú, contó José, tendrá el apoyo personal del prefecto de Morona Santiago, Marcelino Chumpi, quien también es shuar.
Para la organización de los combates en Gualaquiza, cuyo presupuesto es de USD 25 000 (incluido la velada por el título latinoamericano), existe el compromiso de las autoridades de la provincia.
Toda su planificación y combates apunta a la disputa del título mundial que espera concretarlo en el 2019. “Es un sueño que se planteó desde inicio de su carrera y no está lejano. Con unas 15 peleas y la obtención del título latinoamericano se le abren las puertas para lograr su anhelado objetivo”.
José se entrena todos los días en el polideportivo Leonidas Proaño, en Macas. Su actual entrenador es Elvis Castillo, antes trabajaba con Silvio Ayuy, quien ahora dirige a los pugilistas de Gualaquiza.
El boxeador shuar vive en unión libre con la madre de sus tres hijos: Sasha, Yeicol y Yusatin Victoria, de ocho y cinco años y de dos meses, en ese orden. La última nació dos semanas antes de la disputa del título sudamericano y por eso estaba motivado el deportista.
Raúl aseguró que su hermano es apreciado en Morona Santiago por su carisma, humildad y capacidad dentro del cuadrilátero. “Él representa a los deportistas de la etnia shuar y lo hace con orgullo. Con sus éxitos está impulsando el boxeo en la provincia”.
José dedicó el título sudamericano a los esforzados pugilistas del país y reconoció que lo esperó durante 14 años.