Isaac Quintanilla en uno de los entrenamientos en Cuenca, en la modalidad de bloque. Foto: Manuel Quizhpe/ EL COMERCIO
Isaac Quintanilla sigue la huella de sus coterráneos Carlos Granja y Galo Hernández. El primero es tricampeón mundial juvenil y el segundo está clasificado a los Juegos Olímpicos de la Juventud del próximo año en Buenos Aires, Argentina.
Ambos escaladores imbabureños son ejemplo de superación para Quintanilla, quien con 15 años ya se estrenó en un Mundial de Escalada Deportiva. Él compitió entre el 30 de agosto y 10 de septiembre en Innsbruck, Austria, en la categoría Juvenil B.
El adolescente escalador compite estos días en Cuenca, con motivo de los XII Juegos Nacionales de Menores. En la modalidad de velocidad terminó sexto, pero al día siguiente ganó la medalla de oro en dificultad y hoy busca otra presea dorada en bloque.
Quintanilla definió su participación en el Mundial como “única e inolvidable experiencia”. Su clasificación se registró después del selectivo nacional que se desarrolló en Quito, entre ocho representantes de Pichincha, Imbabura, Guayas y Azuay. Fue el más destacado de todos.
En las competencias y en los momentos de descanso es el deportista más activo de la delegación imbabureña. Siempre está conversando con sus compañeros, dándoles ánimo, bromeando. Es eufórico cuando llega a la cima del muro artificial, en el aire (colgado de una cuerda) sacude sus manos como señal de triunfo y grita el nombre de su provincia.
Desde los siete años practica la escalada. “Desde pequeño me gustaban los deportes extremos y la escalada me abrió sus brazos”. A su criterio, esta disciplina requiere de concentración, confianza en sí mismo, fuerza en brazos y piernas, así como “cero nervios”.
El seleccionado nacional es alumno del primer curso de la Academia Militar San Diego de Ibarra. “Distribuyo mi tiempo entre el deporte y el estudio, y no he tenido problemas por ahora”. Es el primer escalador en la familia y su fuerte en la modalidad de dificultad.
Su sueño es buscar un cupo para los Juegos Olímpicos en Tokio 2020. Él está consciente que aún falta un largo tramo por recorrer, pero el proceso está dirigido hacia ese objetivo. El próximo año anhela competir en otro Mundial.
Pablo Benedetto, técnico de Quintanilla, contó que el 2016 no pudo competir en los Juegos Nacionales de Menores porque no alcanzó el cupo, pese a sus progresos. Pero, este año, ganó dos medallas de oro en la primera válida nacional y clasificó sin problemas a los Juegos en Cuenca.
Según el adiestrador argentino, “Isaac terminó en el puesto 40 entre más de 100 competidores”. Lo considera una buena actuación si se toma en cuenta que fue su estreno mundialista. Por falta de recursos no fue al Panamericano en Canadá, en donde tenía posibilidades de mejor ubicación.
El técnico pone énfasis en la polifuncionalidad del escalador, quien maneja con cierto equilibrio las tres modalidades, aunque su fuerte es la dificultad. “Por el Mundial, este año se ha dedicado más a la dificultad”, pero se ha acoplado rápido a la velocidad y bloque.
Benedetto está convencido que el trabajo de sus dirigidos y del cuerpo técnico, que son dos integrantes, ha sido determinante en los buenos resultados. También reconoció el apoyo que reciben para los viajes de parte de la Federación Deportiva de Imbabura.
En Cuenca, Imbabura dominó la modalidad de dificultad; mientras en velocidad se ubicó segunda, detrás de Guayas. A Quintanilla se suman Daniel Ramos, Milena Taboada, Damaris Rubio, entre otros.
A más del Mundial, Isaac tiene previsto participar en el Panamericano Prejuvenil, cuya sede está por definirse.