Cuando se escucha la palabra política, los ecuatorianos huyen. Es un tema del cual se habla muy poco en el día a día, ya sea una conversación casual o discusión entre amigos.
Con el fútbol pasa todo lo contrario. Se habla mañana, tarde y noche. Se pelean por equipos, se hacen nuevas amistades, gracias a que comparten un gusto. Y, sobre todo, no es un tema sensible.
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Los ecuatorianos prefieren el fútbol
Esto se puede evidenciar en la cuesta que realizó Click Research EC llamada ‘Así somos los ecuatorianos‘.
La encuestadora realizó una medición de hábitos y gustos de los ecuatorianos sobre distintos temas, algunos de ellos fueron el fútbol y la política.
Allí se menciona que el 63,03 % de los ecuatorianos prefiere hablar de fútbol. Mientras que, el 36,93 % restante escogió la política como tema principal de diálogo.
El estudio cuantitativo se realizó en formato de encuestas cara a cara en hogares.
Se llevaron a cabo más de 4 500 encuestas en 12 ciudades del país, entre ellas estaban Quito, Guayaquil y Cuenca. Y tiene una representatividad estadística del 95 % y un margen de error del +/- 3 %.
Captura de pantalla sobre la encuesta realizada por Click Research EC.
¿Por qué los ecuatorianos prefieren el fútbol antes que la política?
Hay varias razones por las cuales los ecuatorianos prefieren conversar de fútbol antes de política. Es menos polémico y se conoce más sobre el tema, fueron los argumentos que más repitieron los entrevistados de Diario EL COMERCIO.
“Me gusta hablar de lo que sé […]. En el fútbol no puedes mentir, o se gana, se pierde, o se empata. Se juega bien o mal, no hay más, algo que obviamente no te da la política porque nunca se sabe toda la verdad”, explicó Juan Diego Figueroa, de 25 años y fanático del Deportivo Quito
“Prefiero conversar de fútbol porque es menos polémico y no se discute tanto”, comentó Ramón Núñez, de 39 años e hincha de Barcelona SC.
“En el fútbol te peleas, pero te arreglas más luego. En la política no siempre pasa eso. A veces no vuelves a conversar con la persona que discutiste durante mucho tiempo porque se molestó de verdad”, dijo Wagner Alzamora, de 31 años y que no es hincha de ningún equipo en el país.
