El último fin de semana se disputó en Turquía el clásico de Estambul entre Besiktas y Galatasaray. El partido fue suspendido debido a que los hinchas del Besiktas invadieron la cancha. 66 personas fueron detenidas tras los actos de violencia en el escenario deportivo.
A los aficionados del Besiktas les disgustó que Felipe Melo, volante del Galatasaray, levante su camiseta al momento de salir del campo de juego. El jugador brasileño fue expulsado y elevó los ánimos de los hinchas locales por presumir el sello de su club.
Ante esto, cientos de hinchas del Besiktas invadieron el campo. Los jugadores de ambos equipos ingresaron rápidamente a los camerinos y fue la policía la que tuvo que luchar contra aquellos que ingresaron al campo de juego.
Los hinchas utilizaron las sillas del estadio para atacar a quienes se les enfrentaron. En el escenario deportivo no se encontraban hinchas del Galatasaray debido a que por seguridad, la aficón del equipo visitante no pudo ir al estadio.