Keylor Navas detuvo el lanzamiento penal al jugador griego Theofanis Gekas. AFP
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Como en Italia 1990, el héroe de Costa Rica tiene nombre de portero, aunque en esta ocasión la hazaña de Keylor Navas superó la de Luis Gabelo Conejo.
Navas detuvo el penal de Theofanis Gekas que permitió a su selección avanzar por primera vez a los cuartos de final de un Mundial, al imponerse 5-3 a Grecia en la tanda de penales tras el 1-1 del tiempo reglamentario.
Pero no sólo hizo eso. En la primera mitad salvó en el minuto 37 el gol de Dimitrios Salpingidis con empate sin goles, y tras el tanto del empate griego que arruinaba el triunfo que ya parecía en las manos “ticas” detuvo un remate de cabeza de Konstantinos Mitroglou en el último segundo.
En la prórroga, siguió su exhibición. En el minuto 112 salvó un contragolpe de cinco contra dos mal ejecutado por Grecia y en el 120, de nuevo en el último suspiro, volvió a evitar el gol de Mitroglou.
Navas, tras su gran temporada en el Levante de España, se confirma así como uno de los mejores porteros del momento. “Es un muchacho que desde muy pequeño, desde sus 14 años, es muy centrado en sus acciones”, había dicho Conejo en una entrevista con la agencia dpa esta semana.
Como Navas en Brasil, Conejo deslumbró con sus intervenciones en Italia 90, la única vez hasta ahora que Costa Rica había avanzado a octavos de final.
La revista France Football lo eligió como mejor guardameta de aquel Mundial. “Es un tipo alegre, con mucho hambre y que sabe muy bien lo que quiere. Yo creo que va a llegar muy, muy lejos”, dijo Conejo, ahora en el cuerpo técnico del conjunto
centroamericano.
“Hoy por hoy conseguir un portero que sea muy rápido en el piso, que sepa leer un partido, que la información que transmita a sus compañeros sea efectiva, que sepa tomar buenas decisiones, que tenga juego aéreo y que independientemente de eso sea técnicamente muy bien dotado con las dos piernas eso es algo ya muy difícil de encontrar en los porteros”, elogió a Navas.
Tras lo visto hoy, domingo 29 de junio muchos se habrán convencido. Navas protagonizó una gran campaña en España en el modesto Levante, un equipo que inició la temporada preparado para pelear hasta el final por la permanencia en primera división y que al final apenas sufrió para lograr el objetivo.
En gran parte gracias a Navas. “He tenido un duro viaje hasta llegar a donde estoy, pero he luchado mucho y ahora estoy cosechando los frutos”, explicó el portero, que ya brilló en el triunfo ante Uruguay en la primera jornada del Mundial.
Tras ese largo camino, Navas, de 27 años, aspiraba ahora a dar el salto en Brasil para conseguir un gran contrato en un equipo con mayores aspiraciones que el Levante.
Los números lo avalan: Navas concluyó la última Liga española como el segundo arquero menos goleado tras el portero belga del Atlético de Madrid Thibaut Courtois y el primero en paradas.
Y eso que Navas empezó la temporada recibiendo siete goles ante el Barcelona. Pero a partir de entonces tuvo la mejor temporada de su carrera. Navas jugaba en el Saprissa de Costa Rica cuando el modesto club español Albacete lo contrató en 2010.
Un año más tarde firmó por el Levante. En las dos primeras temporadas fue suplente del uruguayo Gustavo Munúa y la campaña pasada se convirtió en el titular gracias al arduo trabajo realizado bajo la tutela de Luis Llopis, uno de los más respetados entrenadores de porteros de España.
Navas llegó a la titularidad del Levante con la reputación de ser un arquero espectacular, pero Llopis, como Conejo, creía que podía llegar a ser mucho más que eso.
Ahora tiene cuatro o cinco kilos menos de peso que cuando aterrizó en el Levante. “Las horas de ejercicios de entrenamiento basados en mejorar su capacidad de acelerar, frenar y cambiar de dirección rápidamente en el área han dado sus frutos”, dice Llopis.
Ese rendimiento lo trasladó a la selección de Costa Rica y en toda la fase de clasificación para la Copa del Mundo sólo recibió siete goles, únicamente por detrás de Estados Unidos.
El Mundial no termina para Costa Rica, que se medirá a Holanda en los cuartos de final. Cuando lo haga, muchos equipos comenzarán la batalla para asegurarse los servicios de Navas pagando un precio al Levante que estará en torno a los 11 millones de dólares. Mucho más vale para Costa Rica lo que hizo hoy en Recife.