El presidente del Barcelona Sporting Club llegó hasta las instalaciones del estadio Monumental. Mientras la madre de Alex Bolaños, Leila Reasco intentó hablar con él. Foto: Enrique Pesantes/ EL COMERCIO
Álex Bolaños recibió una sorpresa cuando llegó al estadio Monumental para la pretemporada del Barcelona Sporting Club, allí estaba su madre, Leila Reasco, esperándolo para entrar juntos al escenario deportivo.
El jugador tuvo un entredicho con el presidente del club Antonio Noboa, al término de la final del campeonato del año pasado, ante Emelec. Bolaños fue expulsado de ese partido al minuto 10 tras dos faltas sobre su hermano, Miller.
La madre del futbolista no se acercó al auto de su hijo porque los periodistas presentes lo asediaron con cámaras y grabadoras. En ese momento -coincidentemente- arribó Antonio Noboa al escenario, fue allí cuando Leila aprovechó para intentar conversar con el directivo.
Noboa estaba hablando por teléfono y la decidida madre golpeó la ventada del auto en el que llegó el presidente, esperando que este la atendiera, pero eso no se dio. El titular de la escuadra canaria hizo una seña con su mano señalando el estadio y siguió su camino.
Ella evitó hablar con los periodistas e ingresó al estadio, subió al auto de su hijo y se dirigió a la cancha alterna Sigifredo Chuchuca. Cuando regresó solo dijo: “si no lo quisieran en el equipo (a Bolaños), no le habrían dado el uniforme”. No detalló que pasará con su retoño.
Bolaños tiene contrato con los amarillos hasta diciembre de 2016 y su deseo es cumplir con ese vínculo. Por eso pidió disculpas públicas a la hinchada cuando al estadio y posteriormente se excusó con sus compañeros antes de la práctica.