Cristiano Ronaldo dañó la intención de Barcelona de llevarse una victoria del estadio Santiago Bernabéu. Hasta los 81 minutos, el cuadro ‘culé’ vencía por 1-0 con un tanto de penal de Lionel Messi. Sin embargo, ‘CR7’ como se conoce al delantero portugués, empató el partido para el Real Madrid, que terminó 1-1.
Real Madrid y Barcelona empataron ayer en el estadio Santiago Bernabéu en el primero de los cuatro clásicos españoles que se jugarán en las próximas semanas.
El partido de ayer fue válido por la Liga española. El miércoles, los dos equipos volverán a encontrarse en la final de la Copa del Rey en el estadio Mestalla de Valencia.
Además, los dos prestigiosos cuadros españoles rivalizarán en las semifinales de la Liga de Campeones de Europa, el 27 de abril y el 3 de mayo. El partido de ida se jugará en Madrid.
El penal convertido por Cristiano Ronaldo transformó la historia del partido. El portugués definió con eficacia y le permitió a su equipo seguir abrigando esperanzas de conseguir el título.
Sin embargo, las mejores opciones siguen siendo del Barcelona que lidera la tabla con 85 puntos. El Madrid ocupa la segunda posición con 77 unidades.
El partido tuvo un ritmo frenético y en los últimos minutos, los dos equipos buscaron desesperadamente el tanto de la victoria. Incluso se produjeron algunos roces entre los jugadores, debido a la gran rivalidad que existen entre los dos equipos.
El Barcelona se adelantó en el marcador gracias a un penal convertido por Lionel Messi, a los 53 minutos del compromiso.
A los 52 minutos, el delantero David Villa avanzaba hacia el área con grandes posibilidades de vulnerar al golero Íker Casillas. De pronto, el defensa Raúl Albiol en su intención de impedir el avance del ‘Guaje’, lo tomó por el cuello y lo derribó en el área. El árbitro decretó el penal y la expulsión del zaguero. Lionel Messi cobró el lanzamiento y venció al guardameta Casillas.
Messi fue uno de los jugadores más activos del cuadro catalán, que, fiel a su costumbre, buscó desde los primeros minutos del partido adueñarse del esférico.
Sin embargo, el cuadro local también se mostró agresivo durante todo el compromiso. En la semana previa al juego, los jugadores le prometieron a su hinchada desquitarse del 5-0 propiciado por el Barcelona en el partido jugado en noviembre pasado.
En el segundo tiempo y tras recibir el tanto, el Real Madrid intentó reaccionar y el técnico José Mourinho mandó a la cancha a Emanuel Adebayor y al volante alemán Mesut Özil.
La presión de los ‘merengues’ fue tan fuerte que a los 81 minutos pudieron empatar el partido, luego de una supuesta falta penal sobre el lateral Marcelo.
Al final del compromiso, la afición de Real Madrid despidió a sonoras silbatinas a Messi, la figura de los azulgranas.