Con la contratación de David Beckham, un veterano de 37 años, el París Saint-Germain tomó una decisión deportiva cuestionable, pero impecable para su estrategia de marketing.
Beckham es un gancho comercial para cualquier club y la mejor prueba es el paso del inglés por el Real Madrid, entre el 2003 y el 2007. De los cuatro ‘galácticos’ de aquella época (Luis Figo, Zinedine Zidane, el brasileño Ronaldo y Beckham), el ‘spice boy’ es el que más rentabilidad económica brindó al equipo español.
Los números hablan por sí solos: fue fichado por cerca de USD 37 millones al Manchester United en 2003 y su sueldo era de USD 7 millones por temporada. Sin embargo, en sus cuatro años en la capital española, el inglés proporcionó al Madrid unos USD 430 millones. Esto, según las cifras reveladas por José Ángel Sánchez, ex director de marketing del Real Madrid.
Según un artículo en el diario español económico Cinco Días, el club blanco vendió un millón de camisetas en los seis primeros meses de la llegada de ‘Becks’ al Santiago Bernabéu.
Dos años después de su fichaje por el Madrid, el histórico equipo español disparó sus beneficios por ‘merchandising’ en un 60%.
Florentino Pérez renunció en el 2006 de la presidencia del club y puso fin a aquella época de fichajes ‘galácticos’. El dirigente volvió a la cabeza del club en 2009 y trató de reeditar la fórmula, fichando a estrellas como Kaká, Karim Benzema, Xabi Alonso y, sobre todo, Cristiano Ronaldo.
Eso sí, Beckham no llega al París Saint-Germain con la misma condición de estrella con la que desembarcó en Madrid. Desde 2007 ha estado en Los Angeles Galaxy, un club estadounidense donde su impacto mediático ha sido mucho menor. Además, a sus 37 años parece estar en el declive final de su etapa como jugador.
En el éxito comercial para el Real Madrid fue clave que Beckham cediera un importante porcentaje de sus derechos de imagen, según la política impuesta por Pérez.
En la segunda etapa del presidente del Real Madrid, desde 2009, los jugadores suelen ceder un 40% de sus derechos de imagen, según el contrato estándar que maneja el club.
Esa circunstancia la recordaron algunos periodistas españoles al analizar el motivo de la “tristeza” de Cristiano Ronaldo al principio de la actual temporada. Ellos consideraban que realmente lo que quería el portugués era contar con una mayor parte de sus derechos de imagen o incluso con la totalidad de los mismos.
En el París Saint-Germain se aplicará en principio un principio similar para el caso de Beckham.
El ex internacional inglés cedería alrededor de un 50% de sus beneficios publicitarios al club. Sin embargo, la medida solo afectaría a los acuerdos firmados desde la firma del contrato deportivo con el equipo francés.
En principio, el mediocampista británico firmó apenas por cinco meses. Por esto, no parece probable que el París Saint-Germain obtenga efectos tan positivos como los que sí logró el Real Madrid de España.
Por el momento, la venta de camisetas con el nombre de Beckham ya ha comenzado y el club intentará aprovechar al máximo su imán publicitario y su gancho comercial. El futbolista tiene previsto entrenarse con su nuevo plantel desde el 13 de febrero.