Anderson Julio (11) celebra uno de los dos goles que le marcó a Aucas, en la victoria alba del pasado 28 de noviembre. Foto: API para EL COMERCIO
Las ruedas de prensa son espacios en los que, en escasas ocasiones, se producen declaraciones polémicas. Los futbolistas y entrenadores prefieren dar respuestas casi programadas y automáticas ante preguntas que, también son repetitivas.
Sin embargo, en esta semana, Anderson Julio se mostró autocrítico ante una interrogante de este Diario. ¿Qué aspectos de su juego debe cambiar para consolidarse un mejor futbolista? El ofensivo, nacido en Pimampiro, hace 22 años, respiró hondo y exclamó: “Debo mejorar en el uno contra uno y en la definición. Estoy trabajando todas las semanas con el profe para lograrlo”, dijo el futbolista, vestido con el uniforme gris de entrenamiento y sandalias azules con medias.
Pese a estar presente en 42 de los 44 partidos del torneo y haber anotado 10 tantos, Julio siente que su temporada no ha sido redonda y contundente.
El imbabureño ha perdido confianza y sus vacilaciones generaron que, a mediados de temporada, el cuerpo técnico albo pidiese la contratación de un futbolista que compita con él por el puesto: Julio Angulo.
Sin embargo, el entrenador Pablo Repetto cuenta con Julio y por ello, él y su asistente Óscar Quagliata empezaron a trabajar con el futbolista para que vuelva a mostrar las características explosivas de gambetas en velocidad que los encandilaron el año pasado.
Repetto no lo duda: para él, Anderson y su hermano Jhojan son jugadores de élite y marcan diferencia. “Tienen velocidad, buena gambeta, ida y vuelta. Anderson ha perdido un poco de confianza, pero estamos trabajando en aquello”, admite el DT que es partidario de futbolistas rápidos en el traslado del esférico y comprometidos con la marca.
Un talento discutido
Anderson Julio es considerado en Liga una joya por pulir, un jugador de exportación. Llegó a la institución alba cuando tenía 13 años, de la mano de Nixon Carcelén, exvolante imbabureño del equipo y formador de juveniles.
Julio inició su carrera en el valle del Chota, el equipo de Agustín Delgado, pero reconoce que Liga ha sido su casa.
Ahora, su mayor deseo es ser campeón con los albos, pero dice que antes que una final o pensar en festejo, la clave es enfocarse en el partido del sábado 8 de diciembre de 2018 ante Delfín Sporting Club, en el estadio Rodrigo Paz, a las 12:00.
Liga debe ganar a los ‘cetáceos’ y esperar que Técnico Universitario obre el milagro y se imponga a Emelec en el estadio Bellavista, de Ambato.
Anderson Julio (11) de Liga de Quito controla el balón en el cotejo de la fecha 19 de la segunda etapa del campeonato nacional ante Aucas, jugado en el estadio Gonzalo Pozo. Foto: Galo Paguay / EL COMERCIO
Si se concretan las dos victorias, los albos podrán festejar el título. Si el ‘Ballet’ derrota al ‘Rodillo’, la definición del título se cumplirá en partidos de ida y vuelta entre los azules y los blancos, desde la otra semana. “No queremos pensar en
una final, pero sabemos que puede darse. Nuestra mente solo está enfocada en este partido con el Delfín SC”.
En el grupo de futbolistas albos, Julio y su hermano Jhojan son bien valorados. Gastón Rodríguez, por ejemplo, dice que Anderson marca diferencia
en los últimos metros. Pese a ello, el futbolista es discutido por los hinchas en redes sociales y recibe silbatinas durante los partidos: se lo considera un velocista, un atleta reconvertido en futbolista, más que un jugador que sepa hacer la pausa.
Julio reconoce que hay críticas y las acepta. Pero sus compañeros lo defienden con vehemencia: “No solo que colabora cuando perdemos el balón, sino que ha marcado goles importantes para el equipo”, apunta el capitán de los azucenas, Jefferson Intriago.
El futbolista es el segundo mayor anotador de la ‘U’ en el certamen, con 10 tantos, cinco menos que el goleador máximo, Juan Luis Anangonó. Esta es su producción más alta como profesional desde su debut en el 2016. En los dos campeonatos anteriores en los que tuvo actividad marcó cuatro tantos, dos en el 2016 y dos en la temporada pasada.
Sus buenas actuaciones, sumadas a su juventud, ya generan interés en mercados del exterior. A Liga han llegado propuestas por él, aunque en la Casona están enfocados en ganar el campeonato y tener un equipo potente para ser protagonistas el próximo año en la Copa Libertadores. Eso implica mantener la base de futbolistas -Anderson Julio incluido- y sumar dos o tres refuerzos.