Eduardo Favaro, entrenador de El Nacional (con gorra), dirige una práctica en el Complejo El Sauce, en Tumbaco. Foto: Archivo/EL COMERCIO
Los centros por alto, que los rivales realizan al área defendida por el golero Johan Padilla, de El Nacional, son la principal preocupación del entrenador uruguayo Eduardo Favaro.
El estratega admite que, a través de esa vía, los equipos rivales consiguieron anotaciones que complicaron a El ‘Nacho’ y lo mantienen en una crisis futbolística. El plantel lleva nueve partidos sin ganar.
El sábado, por el torneo local, los rojos vencían 3-0 al Delfín, en el primer tiempo, pero en la segunda etapa encajaron tres conquistas. “Cada pelota en nuestra área fue una complicación”, se lamentó el estratega, quien dijo que la forma de salir del “mal momento” es con trabajo y humildad.
¿Y el aspecto futbolístico? Favaro considera que sus dirigidos deben jugar como lo hicieron en el primer tiempo ante los cetáceos: mantener el control de la pelota, presionar a sus rivales en su campo y generar juego por los costados. Con esa convicción, el DT plantea la estrategia de hoy para medir al Defensa y Justicia de Argentina, a las 17:30, en el encuentro de vuelta por la segunda fase de la Copa Sudamericana.
En la ida, en Argentina, los militares cayeron 2-0, por desconcentraciones en la zaga. Por ello, necesitan marcar tres goles y no recibir un tanto para avanzar a la siguiente instancia. En caso de que los visitantes marcaran un gol, El Nacional se vería obligado a convertir cuatro tantos.
“Debemos defendernos con el balón”, recalca el estratega charrúa, antes del cotejo de esta tarde. Ahí, ya contará con Manuel Balda, quien no estuvo en la ida. El manabita aporta con su juego creativo y sus remates de media distancia.
Balda ya tuvo minutos contra Delfín tras superar una lesión. El técnico lo sacó en el segundo tiempo porque quería evitar que se volviera a lesionar por el trajín del partido.
Algo similar ocurrió con el atacante manabita Miguel Parrales, quien volvió a jugar en ese partido tras dejar atrás una lesión. El manaba entró en el segundo tiempo para reemplazar a Daniel Angulo, quien se ha ganado la titularidad en la delantera.
Con ellos, el técnico planificó ayer la estrategia en el Complejo de Tumbaco. Las entradas se venden desde el fin de semana. La general cuesta USD 5: tribuna, USD 10; y palco, USD 15. Hoy, los boletos se podrán adquirir en el estadio Olímpico Atahualpa.
Tito Manjarrez, presidente de los criollos, exhortó a que los hinchas acudan al estadio, pese a la situación crítica del plantel. Indicó que el club necesita recursos económicos y los jugadores se motivan con la presencia de los aficionados.
Al último encuentro, ante el Delfín, fueron 1 900 personas, en una de las peores asistencias a un encuentro de local del plantel, en la temporada.
D. Cuenca es visitante.
Con uniforme alterno, color cardenillo, Deportivo Cuenca juega hoy ante Jorge Wilstermann, en Bolivia. El juego arranca a las 17:30, en el Félix Capriles de Cochabamba.
Los dirigidos por el venezolano Richard Páez confían en regresar con la clasificación a la tercera fase. En la ida de la segunda etapa, el cuadro boliviano empató de visita 2-2. El representativo ecuatoriano debe ganar para clasificar o igualar 2-2 para definir en penales.
Páez dejó en duda quién será el acompañante de Anthony Bedoya, en la zaga, ante la ausencia del argentino Brian Cucco (suspendido). La alternativa es Rubén Cangá o el argentino Luca Sosa, quien aún no debuta en el torneo.
El goleador Jacson Pita vuelve tras una suspensión.