En el complejo de Carcelén, sitio de prácticas del Deportivo Quito, fueron retirados los medidores de agua potable. Foto: EL COMERCIO
Los jugadores del Deportivo Quito decidieron no entrenarse. El plantel chulla volvió a paralizarse este jueves 7 de abril mientras esperan que la directiva les paguen los salarios atrasados de febrero y marzo. En el complejo Ney Mancheno, los futbolistas se cambiaron, pero no salieron a prácticar.
La directiva, comandado por Freddy Mayorga, anunció que hoy se les cancelaría los salarios. Sin embargo, hasta las 10:30, no cumplían con la promesa de pago y eso obligó al grupo a tomar la decisión de paralizarse por segunda vez en esta semana.
”Confiamos que la directiva cumpla con el pago. La parte anímica de los jugadores no está bien. Esperamos que se cumpla con lo ofrecido”, dijo el entrenador Marcelo Fleitas.
A esto se sumó otro problema. En el complejo no hay agua potable. La empresa municipal cortó el servicio por una deuda que se acercaría a los USD 15 000. Según Mayorga, se busca un acuerdo de pago con el Municipio.
Este Diario buscó la versión del presidente, pero no contestó. El plantel de jugadores no practicó mientras no les cancelen una parte de la deuda.