Francisco Vallejo, MarÃa Fernanda Hernández, Jimmy Recalde y Sebastián Vera se entrenan junto a Fanny Vilcacundo en el estadio Atahualpa. Foto: Julio Estrella/ EL COMERCIO
La respuesta fue solo la expresión de admiración a una colega. “Martha Tenorio era una bestia para correr, no se le podÃa ganar, pero se hizo el intento”, dijo Fanny Vilcacundo. Las dos exatletas de élite pelearon palmo a palmo el primer lugar de la Quito-Últimas 15K.
“Es la carrera que todos quieren ganar. En la década de los años noventa, era la ventana para competir en el exterior”, añadió. Ella, hoy, tiene 40 años y dirige a 25 atletas que comparten su vida ejecutiva con el atletismo de fondo. “En nuestra época, llegar entre las 10 primeras de la clasificación era un mérito porque habÃa una generación de 15 atletas con un alto nivel. HabÃa una cerrada rivalidad con Martha Tenorio, MarÃa Teresa Paucar, Yolanda Quimbita, Sandra Ruales, Vilma y Lilian Guerra. Además, la organización traÃa a atletas de nivel como la peruana Marilú Salazar y la colombiana Estela Castro“.
Recordó que en esos años noventa, las damas tenÃan su carrera que partÃa una hora antes que el grueso de competidores. “Todas pugnábamos por estar en el pelotón puntero porque querÃamos salir en la televisión. También por toda esa rivalidad que existÃa, porque llegaban las mejores atletas de provincia y se convertÃa en un carrerón”.
Por eso le parece muy buena la iniciativa de la organización de que el grupo élite de las mujeres parta 10 minutos antes que el grueso de competidores. “Al ir en un solo pelotón, las atletas van probando estrategias y controla a las rivales. Además se recupera el protagonismo de las ganadoras en las diferentes categorÃas”.
Al hablar sobre Martha Tenorio recuerda su ritmo de carrera y destaca su profesionalismo. “Era imposible ganarle. Tomaba los primeros lugares desde el inicio, por algo ganó 10 ediciones de la Últimas”.
Fanny Vilcacundo se retiró del atletismo de élite por una lesión del nervio ciático. Se mantiene en la actividad deportiva ahora en su rol de entrenadora desde hace cinco años. “Estoy entrenando, espero volver a competir en mi categorÃa de máster porque mi vida deportiva nació en esta carrera. Empecé en la categorÃa menores cuando cumplà 15 años, luego en la juvenil y la sénior. Corrà todos los años hasta mi retiro”.
Ella no recuerda el número exacto de carreras en las que intervino, que pudieran superar las 16. Llegó tercera en el 2002 y 2004.
“En nuestra época de deportistas de élite habÃamos muchas atletas, hoy existen dos a tres atletas de alto nivel. La buena noticia es que está naciendo una generación de atletas bajo la dirección de Sandra . RualesLas he visto, son jovencitas, pero han logrado triunfos importantes”.
Se refiere a Carmen Toaquiza, quien es la actual campeona sudamericana de Cross Country y a Katerine Tisalema, que integró la selección nacional que fue al Mundial en Uganda.
Su grupo de atletas no pertenece a la élite. “Son personas que practican este deporte para mantenerse bien. Les ayudo a que se impongan metas y que las cumplan. Trabajamos en la parte fÃsica y psicológica“.
El grupo se entrena en el estadio OlÃmpico Atahualpa, en los parques La Carolina y Metropolitano, y los fines de semana escoge lugares de montaña como El Cinto y El Chaquiñán para hacer trabajos especÃficos de fortalecer músculos. “Asà vivo el atletismo, que es mi deporte y mi pasión. Ellos son ahora mi inspiración”.