El esloveno Tadej Pogacar aseguró que tenía marcada la etapa 7 del Tour de Francia y señaló que la victoria se la debía a sus compañeros, que trabajaron duro durante toda la jornada del 8 de julio del 2022.
“Cuando Vingegaard ha atacado me he dicho que mis compañeros han trabajado toda la jornada y tenía que recompensarlos”, dijo el ciclista del UAE, que lució unas zapatillas especiales de una campaña de lucha contra el cáncer por la que también quería ganar.
Además, indicó que también era importante para su familia, que presenció la etapa “in situ”, parte de ella en el pie del puerto y su novia en el último kilómetro, donde bajó a encontrarla tras cruzar la meta.
“Desde hace mucho tiempo tenía en mente que esta etapa era especial y era un día especial ganar”, señaló el esloveno, que hace dos años se impuso en una contrarreloj en ese mismo escenario y certificó la victoria en su primer Tour.
Camino del tercero, Pogacar sumó su segunda victoria consecutiva, séptima en total, con lo que afianzó su maillot amarillo. Respondió a un ataque del danés Jonas Vingegaard, que parece el único capaz de plantarle cara, pero le superó en los últimos 50 metros en la meta.
“Vingegaard es uno de los mejores escaladores del mundo y tiene un equipo muy fuerte con él. Me ha costado mucho atraparle, he tenido que forzar al máximo, pero quería este triunfo a toda costa”, declaró.
Gracias a las bonificaciones, Tadej Pogacar aventajó en otros cuatro segundos a Vingegaard, que ahora está a 35. “Toda la distancia es poca contra él, tengo que buscar sacarle más tiempo”, destacó.
El esloveno reconoció que, hasta ahora, todo le ha salido de cara, pero no dio por finiquitada la carrera.
“Han sido siete días formidables para mi, con dos victorias de etapa y el maillot amarillo. Pero el tour no ha terminado.
Hoy se ha visto la fortaleza de los rivales. Quedan muchos puertos que subir, solo hemos subido uno”, agregó.
El líder de la carrera aseguró que, además, “la diferencia que hay en la general no es enorme”, por lo que, aunque señaló que afrontan lo que resta “con confianza”, indicó que darán “todo para defender el maillot amarillo”.
Tadej Pogacar dijo que no está preocupado por posibles alianzas de sus rivales contra él, porque, a su juicio, cuando la carretera se empina “prevalecen las fuerzas por encima de los equipos”.
“Que se alíen o no cambia poco, en todo caso tienes que ser el más fuerte”, subrayó.
Los colombianos en el Tour
El ciclista colombiano Daniel Martínez, del Ineos, fue undécimo en la primera etapa de alta montaña a 45 segundos del ganador, el esloveno Tadej Pogacar, del que ahora le separa 1:55 minutos en la general.
En el mismo grupo entró Rigoberto Urán, que pierde 3:09 con respecto al líder, mientras que Nairo Quintana cedió algo más de renta, 51 segundos, y está a 2:06 del maillot amarillo.
Martínez vio cómo los franceses David Gaudu y Romain Bardet le superaban en la general, mientras que el ruso Alekxadr Vlasov perdí tiempo y se caía de los 10 mejores.
El ciclista del Ineos tiene dos compañeros por delante, los británicos Geraint Thomas, vencedor en 2018, y Adam Yates. El primero, quinto en la etapa de hoy, está ahora en el tercer puesto, a 1.10 de Pogacar y aparece como la baza más sólida de su equipo para pelear por la general.
Yates fue noveno a 29 segundos y en la general es cuarto a 1.18 del líder.
Quintana, por su parte, sigue asegurando que está teniendo buenas sensaciones, aunque el explosivo final no se adaptaba a sus condiciones, por lo que cedió tiempo en la meta, una renta a la que restó importancia.
El líder de Arkea afirmó que todavía tiene que llegar su terreno, la alta montaña, en la que espera recuperar la mejor versión, la que le llevó a subir en tres ocasiones al podio de París.
“Cuando llegábamos muy arriba iba bien con ellos, me faltó el último tramo, muy explosivo, con hombres muy potentes. Esperamos seguir bien. La regularidad es la clave para la general, mantenerse con los mejores”, indicó.
Quintana reconoció “sufrimiento” en el último kilómetro, donde había cotas al 24 %, pero afirmó que ha trabajado mucho para afrontar este tipo de pruebas y se dio a tope para perder el menos tiempo posible.
“En la rampa final me faltó un poco de aíre y hasta que recuperé ya se habían ido. Pero seguimos con optimismo y adelante”, aseguró el ciclista, que destacó el “coraje” que le puso para perder el menor tiempo posible.
“Estoy ahí, espero ir poco a poco mejor o mantenerme ahí. Esta era una llegada muy explosiva para gente más potente”, señaló.
El colombiano reconoció que está afrontando este Tour con mejor talante, porque “cuando cambian los roles y los objetivos cambia el cuerpo”.
“Tenemos que estar alegres, con ganas, con motivación, independientemente del resultado que queremos, hay que darlo todo todos los días”, dijo.
También se planeta la carrera como una prueba de resistencia Urán, que sigue resistiendo con los mejores aunque las caídas le han provocado varios rasguños.
El de EF es uno de los ciclistas más expertos del pelotón y ya sabe lo que es ser segundo del Tour, por lo que no está descartado para hacer una buena participación.