La calzada que permite el acceso a Nayón, cruzando un socavón sobre una quebrada profunda inmediata a la población, se está erosionando bajo el asfalto. Cuando dimos la primera alerta, tiempo atrás, artesanalmente se colocó al borde de la vía una incipiente cinta plástica que prácticamente pasa desapercibida.
Esta vía no solo sirve a Nayón y a poblaciones cercanas como Tanda, San Pedro del Valle, sino a asentamientos importantes de vivienda y urbanizaciones en un sector en pleno desarrollo.
Además, recoge hoy un intenso tráfico que descongestiona la vía principal de Quito a Tumbaco y viceversa; preocupa además que hoy transitan números microbuses que sirven a diferentes establecimientos educacionales del valle; sobre esto, circulan todo el día vehículos pesados que transportan materiales de construcción que lo extraen de las riberas del Machángara.
La Comisión de Seguridad y Convivencia Ciudadana del barrio Timasa, a través de su vicepresidente, ha coordinado -sobre el inminente peligro que advierte esta especie de puente sobre dicho socavón- con algún técnico responsable de la Epmmop, a raíz de lo cual se ha realizado una inspección técnica, concluyendo que por falta de presupuesto este arreglo tendrá que esperar. ¿Hasta cuándo? Hasta que lamentemos una tragedia, Dios no quiera. Pedimos a las autoridades responsables que atiendan este preocupante caso y adopten medidas urgentes para prevenir graves consecuencias.