Tanto se habla del transporte público, pero la verdad es que salvo ciertas excepciones, el resto es desastroso; ni taxis ni buses. A algunos les falta desde lo más elemental que es el saber conducir, más parece que estuvieran montados en un caballo para domarlo. O que estuvieran en una discoteca y para completar las ventas o los clásicos timadores que se suben a diario, a todo lo largo del recorrido, algunos ya son conocidos. La ley de tránsito contemplaba, la prohibición de personas a vender o promocionar algo, pero alguien de las personas de turno, muy comedido dijo que no.
Se habla de seguridad ciudadana, considero que debemos comenzar por algo y sería bueno que sea por aquí. Porque no es justo que todos los días se tenga que aguantar la misma cantaleta coercitiva.
Maltrato de los choferes, controladores y por último los timadores o vividores. Dentro de las mejoras deberían los choferes, solicitar que se aplique la Ley. Son personas que ponen en riesgo a todos, se bajan y se suben al vuelo, y cuando el chofer no les quiere abrir la puerta, allí va el peculiar insulto.