Desde París Rafael Correa envió sus felicitaciones a los asambleístas de Alianza País y dijo estar orgulloso de ellos por haber aprobado las enmiendas a la Constitución. ¿Orgulloso de qué? Si solo permitió estar en la Asamblea a gente de su partido que trajo de diferentes partes del país con todos los gastos pagados.
El lugar fue cercado con rejas metálicas. Había cientos de policías a pie, a caballo y en camiones antimotines para reprimir y amedrentar a los manifestantes. ¿Orgulloso de qué? Si es como si uno se sintiera orgulloso por ganar un partido de fútbol donde los árbitros le obedecen a uno, el público es llevado por uno y para colmo si el equipo rival se acerca a la media cancha, le botan los policías encima para golpearlos y detenerlos.
O Correa no entiende lo que es ganar en buena lid o simplemente le es indiferente y lo único que le interesa es salirse con la suya, así tenga que abusar del poder utilizando cualquier artimaña o creando alguna ley represiva para conseguirlo. Este es uno de los motivos por los cuales la gente ya está cansada de estos gobiernos del socialismo del siglo XXI.