¡Hasta que extremo hemos llegado compañeros! Siempre hemos escuchado sobre la ‘viveza criolla’. Un producto del individualismo y la mezquindad, supuesto rasgo característico de los ecuatorianos que por ningún lado me parece motivo de orgullo, al contrario, lo considero algo vergonzoso.
Menciono esto por la profunda indignación de constatar que en la cola del Bono del Desarrollo humano, vemos de todo un poco. Personas que alegan pobreza y un bajo nivel económico… ¡Con un ‘smartphone’ en la mano, y al niño agripado en la otra! Me sorprende sobremanera el descaro de muchos, que analizándolo fríamente, no necesitan el dinero. ¿Es esta la moral actual? Nos estamos quedando estancados en la mediocridad y el facilismo. Un país así sencillamente no funciona. ¿Cómo podemos quejarnos de vivir en un país subdesarrollado si somos quienes impedimos su avance? Hay gente que realmente necesita esta ayuda, pero sabemos que no es el 100%. ¿Vamos a seguir en esto? ¿Vamos a vendernos a tan bajo precio? Ecuatorianos… los invito a recapacitar y hablar más sobre este tema. Si quienes no requieren realmente el bono, afrontarán el sacrificio de renunciar a él… sé que contaríamos con más fondos para ayudar a quienes realmente lo necesitan. Si por otra parte… no le parece, puede ignorar mi propuesta y cobre nuevamente, que las cuotas del teléfono inteligente no se pagan solas… En cuanto a mi persona, iré a contestar mi celular 1100 que está sonando en algún lado.