¡Qué triste y deplorable es mirar como en las calles y plazas del país, recorren los indígenas, con sus pies descalzos, con la mirada turbia y perdida en los páramos, en las carreteras, en los ríos, sin saber ¿por qué estoy aquí? ¿Qué estoy haciendo? La respuesta sencilla: son utilizados por 4 vivos de siempre, que se aprovechan de la sencillez y la ingenuidad, estos son: Salvador Quishpe, Carlos Pérez, Lourdes Tibán, etc., quienes manejan los hilos de la política, que solo buscan sus intereses con fines mezquinos , sin importarles el sacrificio y hasta la vida misma de esos seres marginados de la sociedad que viven en la soledad y en la miseria.
Todo este bullicio se ocasiona por la intemperancia y el abuso del poder, que no mira las consecuencias de la agitación social y política que está viviendo el país. Señor Presidente, escuche la voz del pueblo, y no permita que se convulsione por su egoísmo y fatuidad, no siga confrontando más con sus opositores, y así podrá pasar a la historia como un gobernante sincero.