Nos faltan tres, terrorismo en la frontera, cantidades masivas de sustancias ilícitas, privan de sosiego a la costa norte ecuatoriana; mientras que denuncias sobre oprobios cometidos por los norteamericanos, contra pescadores simples, acusados de narcotraficantes, tomaron un tinte dantesco, espantoso e ignominioso a la vista de la revolución ciudadana, sin mencionar el aeropuerto internacional Eloy Alfaro que construyeron perfectamente, junto con cierto cuidado de guardacostas al mar ecuatoriano. En estos dos escenarios sería concorde repensar, el no tan virtuoso panorama del ejército ecuatoriano. Lapidario es el criterio que confronta la deslucida y estropeada dotación bélica, razón aparente, para crear un plan de operaciones conjuntas, con ayuda de otras fuerzas especializadas, pero no tan to para tratar de nuevo el tema de la base de Manta.