El presidente Correa tendrá sus segundos de gloria en el país que tanto detesta, los Estados Unidos, donde se supone promocionará los atractivos de nuestro país, aunque no hay campaña turística que valga mientras el Gobierno siga con su política de impuestos que afectan al turismo, comercio y la estabilidad social.
Se gastaron millones de dólares en la campana “All you need is Ecuador” y no hemos visto los resultados deseados, pues la inestabilidad política ahuyenta a la inversión, más aun cuando el clima de confrontación desespera y nos vuelve infelices.
Los 36 segundos que nos muestran la belleza de nuestro país son como un oasis en el desierto y no tienen nada que ver con el Ecuador de hoy, ¡lleno de desencanto, desesperanza y miedo!