La delegación del Gobierno colombiano para las negociaciones con el ELN no podría despedirse del Ecuador sin agradecerles de corazón, tanto al pueblo ecuatoriano como a sus autoridades, la inmensa generosidad, amabilidad y paciencia con la que nos han acogido durante todo este largo tiempo.
Aprovechamos también la ocasión para expresarles a los colaboradores del Diario EL COMERCIO y a todos los ecuatorianos nuestras condolencias por los trágicos sucesos de los últimos días, que repudiamos desde lo más hondo.
Esperamos que nuestros dos países y otras naciones amigas puedan colaborar estrechamente en la búsqueda de soluciones a este grave problema que afecta a los dos lados de la frontera. Continuaremos en nuestra labor, con la impronta de buena voluntad y optimismo que le ha dado el pueblo ecuatoriano al acompañarnos.