Los esfuerzos por participar tanto en forma física, así como a través de las redes, en el concurso para la seguridad vial convocado por el MOPTC quedaron en la nada al chocarme contra un procedimiento informático lleno de claves y restricciones, lo que no me permitió presentar 3 proyectos para tal efecto (1 de carácter técnico 1, de carácter técnico-académico y 1 de carácter social profesional) con miras a la transformación y mejoramiento de la seguridad vial en el país. Qué pena que a nadie le interese dar facilidades para implementar soluciones prácticas para mejorar en este aspecto y mientras tanto se continúa tiñendo de sangre todas las carreteras del Ecuador.