Carta a Jaime Vargas
Hola Jaime ¿cómo estás? Te escribo de manera pública para preguntar tu opinión sobre lo que está pasando en el país. Estoy convencida de que, quienes AMAN AL ECUADOR, no pueden plegarse a este PARO SIN SENTIDO. No he escuchado tu nombre en el Comité de Paro, sí el de Leonidas Iza y también el de Salvador Quishpe, a quien yo consideraba inteligente y patriota. Me permito “tutearte” porque somos conocidos. El Dr. J.C. Trujillo nos presentó alguna vez y tu recordarás que nos hizo una reflexión: “Inmensa distancia hay entre amar al Ecuador y entregar la vida por él, que consagrarse a destruir el país por saciar un ego personal…” Recuerdo que tú y yo le aseguramos que sí amamos al Ecuador… No poder movilizarse con libertad, produce conmoción y pérdidas a nivel personal, familiar, etc. Ayer no hubo gente en los mercados, comerciantes y trabajadores no abrieron sus negocios en todo el país… Y si el paro se prolonga, ¿quiénes son los más perjudicados? Invito al Movimiento Indígena y a través tuyo, a los pueblos amazónicos y de toda la República, a que reflexionen y declinen su postura beligerante en favor de la paz y la concordia que buena falta nos hacen…
Verónica Acosta E
¿Lanzará piedras desde el Palacio?
El presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas (Conaei), se encuentra en campaña electoral (¡quiere ser presidente de la República!) prácticamente adelantado en tres años. El dirigente indígena, quien ejerce una evidente dictadura en la entidad, tiene la certeza de que “al que madruga Dios le ayuda”, sin percatarse de que “no por mucho madrugar se amanece más temprano”, refrán cuyo significado es que no sirve de nada querer anticipar cosas que tienen que suceder en el tiempo debido. Lo preocupante de su estilo es la obsesión de tratar los asuntos con marcada dosis de violencia e intentar imponer su criterio con amenazas, tirando piedras, destruyendo la propiedad pública y privada, disponiendo paros, bloqueos de vías, impidiendo el normal desenvolvimiento de la vida diaria y causando ingentes daños económicos al país. Por ello, no es desatinado intuir y afirmar que, en un hipotético gobierno del líder vernáculo, y para el evento de una manifestación en la Plaza de la Independencia contra “su régimen”, desde el interior del Palacio de Gobierno lanzará piedras y más objetos contundentes (los floreros de Carondelet, sin las flores naturalmente) contra la multitud.
El talante belicoso que exhibe como método para resolver los temas no abona en nada a sus pretensiones políticas. ¿Será probable la transición de autócrata de la Conaie a presidente de la República? ¡Dios nos coja confesados!
Guillermo Pérez de Castro
Academia Nacional de Historia del Ecuador
La Academia Nacional de Historia del Ecuador fue creada inicialmente como “Sociedad Ecuatoriana de Estudios Históricos Americanos”, un 24 de julio de 1909, por el prolífico historiador y escritor, Monseñor Federico González Suárez, acompañado por un grupo de prestigiosos intelectuales quienes una vez convertidos en reconocidos historiadores, algunos años más tarde, condujeron los destinos de esta centenaria entidad con grandes ejecutorias.
El Dr. Franklin Barriga López, Director de la Academia, es quien lidera actualmente esta noble institución y acaba de recibir la condecoración de la Asamblea Nacional “Vicente Rocafuerte”, al mérito cultural y educativo, por su dilatada y extraordinaria labor de más de sesenta años, en los 5 continentes, con 120 libros escritos y más
3 000 artículos publicados en diferentes medios de comunicación social.
El “Congreso Americano de la Libertad”, realizado recientemente fue todo un éxito y contó con la participación de los Directores de las Academias de Historia y Geografía de nuestro continente y, en tal virtud, la Academia Nacional de Historia del Ecuador, tiene a su cargo la Presidencia de estas instituciones fraternas por estos dos próximos años, un hecho que evidencia el liderazgo de nuestra emblemática institución.
Patricia Londoño López
Manifestaciones sin Empatía
En las noticias hablan de movilizaciones sociales que en algunas carreteras estatales de Ecuador han obstruido el paso vehicular con llantas quemadas, postes, y árboles, en fin no tiene sentido. Esto ya pasó de ser una marcha pacífica y hay que ver quiénes están detrás de toda esta barbaridad de lo que está ocurriendo. Los manifestantes piden respeto por que ya están cansados de no ser escuchados. Entonces piensan que esto les da derecho a recurrir a la violencia a sabiendas que el gobierno está dispuesto al diálogo. Ellos se olvidaron del covid-19 que paralizó el mundo entero y el presente gobierno hizo todo lo posible para traer vacunas y tratar de controlar la pandemia lo cual para el gobierno su prioridad fue la salud de los Ecuatorianos. Una pregunta importante es cómo quieren que el País se levante si cada vez que se les ocurren hacen este tipo de paros.
Walter Altamirano