El verbo está de moda y lo están usando para convencernos que las reformas a la Constitución planteadas, pueden ser cambiadas entre carísimos paseos por las provincias. Todos sabemos que no, porque ya los jueces lo resolvieron encerrados en un cuarto en Guayaquil, pero con algo hay que quemar tiempo. Para resumir: socializar es un verbo que puede ser aplicado a todos los seres vivos, por ejemplo: si decidimos transferir a nuestra mascota al Estado u otro órgano colectivo, industrias, etc., le socializamos, pero si le educamos, le entrenamos y le enseñamos que no hay que morder a las visitas, le sociabilizamos. Por tanto, no hay que confundir los dos términos y ni el uno ni el otro calza en este tongo que va a durar un año. Si al pueblo se le hizo aprobar la Constitución de 300 años, es obligatorio que se le pregunte si quiere cambiarla por lo menos hasta que venga el próximo gobierno como es costumbre.