En referencia al Impuesto Verde que grava a la contaminación, el SRI piensa, en hacer una reforma basada en el concepto de cuidar el medio ambiente, indicando que no es sensata su eliminación, sino reformar el cálculo que incluya a los vehículos que contaminan más.
Por otro lado, voluntarios en la lucha de niños con cáncer, saldrán a las calles con pancartas, donde se exhibe la problemática que involucra el cáncer infantil, señalando, entre otros, que uno de cada diez niños menores de 5 años, muere por efectos del esmog.
El SRI, habla de una mejor recaudación, en la que lograría un aumento del 1.6% del PIB. Sin embargo, no se menciona que políticas serán implantadas para disminuir la contaminación de buses de transporte público y camiones de reparto a diésel, que la mayoría funcionan descalibrados y con los tubos de escape hacia abajo, esparciendo más la contaminación, directo al rostro de transeúntes.
Se grava a los vehículos particulares, pero se exonera del Impuesto Verde a buses y camiones, además de premiarles con un precio bajo de diésel subsidiado por todos, tampoco existe un plan de reemplazo para éstos buses y camiones, con otros de motores eléctricos o de otras alternativas que utilicen combustibles más limpios, como el gas, etc.
Si el Estado cobra un impuesto para cuidar el medio ambiente, lo lógico, es que debe crear las leyes adecuadas para preservar y conservar nuestro aire, porque de él depende la vida y salud del país y con los fondos recaudados se mejoren las condiciones de sanidad y seguridad ambiental de toda la población.