Los reparos al control de la LigaPro
Tito Rosales Cox
Editor deportivo
Twitter: @titorosalescox
La LigaPro está en la obligación de transparentar sus procesos antes de que empiecen los campeonatos. Omitir información sobre habilitaciones de futbolistas, pasivos que arrastran los clubes… muestran aún la frágil estructura por la que atraviesa el fútbol.
Lo más sensato y transparente es enunciar las causas por las cuales los equipos no han cumplido con el reglamento de control económico. Pero eso lo tienen que hacer con anticipación, a través de sus canales de difusión, y no por medio de los dirigentes de los clubes, los cuales suelen disfrazar la información para evitar que se deterioren sus imágenes ante la sociedad.
El último ejemplo, vergonzoso por cierto, es lo que pasó ayer en el estadio Atahualpa. El Nacional salió solo con dos futbolistas en la banca de suplentes. Los aficionados quedaron sorprendidos, recibiendo información distorsionada.
La medida de regulación, por cierto, es acertada porque es un mecanismo que obliga a los clubes a administrar sus recursos con parámetros más justos, de acuerdo a sus realidades económicas. Pero también es necesario reflexionar si es viable aumentar a 18 equipos el campeonato, desde el próximo año, cuando los clubes tienen deudas que superan los USD 100 millones. Esa es la paradoja.