El presidente de Bolivia, Evo Molares en las inmediaciones de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que rechazó por 12 votos a favor y tres en contra que Chile esté obligada jurídicamente a entablar negociaciones con Bolivia para que este país obtenga un acceso soberano al océano Pacífico. Foto: EFE
Con el fallo de La Haya de este lunes 1 de octubre del 2018, a Bolivia se le han cerrado una vez más las puertas en instancias internacionales para obtener una salida al océano Pacífico a través de Chile.
El gobierno de Evo Morales sostenía en la Corte que Chile debía someterse a un proceso de negociación con respecto a una salida al mar, que Bolivia perdió después de la Guerra del Pacífico, conflicto en el que se enfrentó junto a Perú contra la nación austral. Sin embargo, la petición no fue reconocida por La Haya.
La Cancillería chilena ha adoptado la posición, durante los años de litigio, de no ceder ante esta petición histórica de Bolivia. Pero para el Estado boliviano la demanda se ha convertido en un pedido permanente que incluso figura en su Constitución de 2009.
La Carta Magna de Bolivia establece que el “derecho irrenunciable sobre el territorio que le dé acceso al océano Pacífico y su espacio marítimo” y “la solución efectiva al diferendo marítimo a través de medios pacíficos y el ejercicio pleno de la soberanía sobre dicho territorio constituyen objetivos permanentes e irrenunciables del Estado boliviano”.
Ahora cerrado el camino de La Haya, probablemente Bolivia continuará presionando diplomáticamente a Chile, pero ¿qué otras opciones podría considerar la nación altiplánica para obtener una salida al mar?
Bolivia tiene frontera común con varios países sudamericanos. Además de Chile están Perú, Brasil, Paraguay y Argentina. Otro punto a favor son varios de los anchos ríos fronterizos que tienen los bolivianos y que desembocan en el Pacífico y el Atlántico.
Aunque generalmente no se conozca mucho al respecto, Bolivia sí tiene una playa. Esta fue cedida por el Gobierno peruano en 1992, pero el territorio hoy en día se encuentra en estado de abandono, menciona la BBC. En la franja de cinco kilómetros de largo y un kilómetro de ancho, los planes de Bolivia eran grandes.
En aquel tiempo se hablaba de construir hoteles, un puerto y terminales de carga. Pero todo quedó en la nada: Bolivia no tiene soberanía sobre la zona, por lo cual no puede hacer caso omiso a los aranceles, que son incluso mayores que si el país sacara sus productos por los puertos chilenos.
La localidad de Boliviamar, ubicada a siete horas de La Paz y casi dos horas de la frontera entre Perú y Chile, tampoco atrae turistas. La playa es sumamente rocosa y esto no atrae a ningún tipo de bañistas. No hay edificaciones, únicamente una franja vacía de arena y mar.
Otro posible paso es Puerto Busch, en la frontera con Paraguay. Bolivia puede aprovechar una salida al Atlántico a través del límite fronterizo con ese país y Argentina gracias a un tratado de 1937.
El río Paraguay serviría para que las embarcaciones bolivianas puedan cruzar. En la localidad hay cierta infraestructura y algunas embarcaciones, pero no se ha logrado crear acuerdos entre el Estado y empresas privadas para desarrollar un puerto.
Por otro lado, Uruguay, Argentina y Brasil han concedido a Bolivia varios pasos con reducción de aranceles para que los barcos bolivianos logren sacar sus productos por el Atlántico. Sin embargo, según publica BBC, estos acuerdos no han sido aprovechados por el Estado boliviano.