Redacción Cultura
Se sabe que para lograr un registro soprano se requiere de mucho trabajo y disciplina, ¿por qué solo pocos lo consiguen?
En primer lugar, cada persona nace con ese instrumento precioso que es su voz, pero aparte está el trabajo, tener la suerte de encontrar un buen profesor de canto que le guíe bien y que no le rompa la voz por querer ir más rápido, de tener una escuela firme, de una gran disciplina y también la dedicación, disciplina y amor para su estudio. Así que no será un sacrificio sino un gusto.
Desde su visión, ¿cómo define usted la voz soprano?
Es el más alto registro dentro de las voces femeninas. En este grupo está una más grave que es la contralto, la ‘mezzosoprano’ que se encuentra en la mitad y luego viene la soprano. Cada una tienen sus particularidades y sus subdivisiones. Pero es de gran exigencia.
¿Por qué hay escasos exponentes del canto lírico en el país? ¿A qué se debe?
¿POR QUÉ ESTÁ AQUÍ?
Su experiencia. La soprano es graduada en el Conservatorio Tchaikovsky de Moscú, con mención de Excelencia y solista de la filarmónica de Moscú y de la Orquesta de Cámara de Moscú.
Su punto de vista. La visita de la soprano Rénee Fleming motivará a los estudiosos del canto del país.
En primer lugar por una falta de la promoción y conocimiento de este género. Faltan temporadas completas de ópera todos los años y en más ciudades del país. Un cantante lírico puede venir a Ecuador, pero no se lo valora como algo excepcional, no le dan las primera páginas de los periódicos. Acá tenemos grandes voces que se dedican a cantar otra clase de melodías, porque son más fáciles o menos complicado para abrirse campo. Pero creo que en este momento está resurgiendo la lírica en el país. He tratado de empujar la lírica en el país porque tuve la suerte de estudiar, desarrollar mi carrera y arte, desgraciadamente afuera.
¿Quiénes fueron sus maestros más exigentes?
La gran profesora soviética, que tenía una magnífica escuela rusa, Nina Dorleac. Con ella estudié 8 años y después fui cada año a prepararme para mis compromisos, a hacer cursos de perfeccionamiento y de limpieza de la escuela, que puede irse deformando, cuando a una nadie le escucha ni le corrige. Estudié canto 7 años. Me dediqué a cuidarme, a ser muy disciplinada, y a preparar papeles y conciertos.
¿Qué fue lo más difícil que debió enfrentar en su preparación como soprano?
Fui becada al Conservatorio Tchaikovsky, de Moscú, sin embargo, para mantener una beca se necesita una dedicación absoluta y que los profesores vean que cada alumno tenga condiciones, de lo contrario te vas de vuelta. Otros aspectos duros: el clima de Moscú y la ausencia familiar.
En el ámbito musical de Ecuador y del mundo, ¿cómo ubica la voz de la soprano Réene Fleming?
El hecho que la soprano Fleming esté aquí es una maravilla, pues es una de las grandes del mundo. Es la preciosa diva del Metropolitan Opera de Nueva York; de Viena y Londres por su bellísimo timbre. Es la más cotizada diva del momento. Para nosotros es una suerte y una especie de bendición poder escucharla. Eso no se ha dado en muchísimo tiempo, recibir un personaje como ella. Ella comenzó cantando Mozart, que es el gran maestro de la voz humana. Además, Fleming es una gran actriz de extraordinaria belleza.
¿Cuáles son los matices que vuelven a Rénee Fleming una de las sopranos más reconocidas?
Ella tiene una calidad de su voz y una musicalidad, con que nació. Si hubiera tenido una voz potente pero no musical, no hubiese podido hacer nada de lo que hace en la actualidad, aparte de su belleza. Talvez habría podido dedicarse a otro género pero, dentro de su genero, está perfectamente bien.
¿Por qué es complejo interpretar a Mozart o Strauss en una ópera?
Una interpretación de Mozart es una melodía límpida, en la que no se puede tener ni una falla técnica ni de afinación porque se nota a leguas. Además, Mozart es genial para lo que es conjunto musical de las voces. Igual para Strauss. Lo que cantará Fleming es muy difícil, muy sutil dentro del campo musical. Nunca tuve la oportunidad de encontrármela en ningún teatro.
¿Qué puede marcar la visita de Fleming a los estudiosos del canto y la técnica vocal en el país?
Muchos ya se habrán preparado escuchándola para comprender la magnitud de esta cantante. Es que aparte del estudio está el conocimiento de los grandes artistas del momento para tener una guía, una ruta a seguir. Lo importante es que los jóvenes de Ecuador que están estudiando canto aprecien mucho lo que sus profesores les dan y quieran aprender más de lo que estudian. La visita de Fleming es un hecho que los motivará mucho.
¿Considera usted que Fleming puede ser la sucesora de María Callas?
Para mí no existen sucesores, porque cada artista tiene su personalidad, su manera de decir su arte. Callas fue una maravilla y la admiro tanto que el Conservatorio que tengo se llama así, porque fue una actriz electrizante, una música tan exigente, como seguramente debe ser Fleming, o como fue Joan Sutherland, que hace pocos años se retiró. Yo era fanática de ella. Cuando era estudiante mi madre me decía que tenía dos maestras: Nina Dorleac y Joan Sutherland. Los grandes artistas no se repiten, cada uno es una especialidad.