Agencias Reuters, AFP, ANSA,
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En Argentina se perdieron 10 millones de hectáreas de cultivos. En Bolivia y Paraguay han muerto unas 16 000 reses por la falta de agua y pastizales.
Esas son algunas de las pérdidas que ha provocado la sequía en Sudamérica, donde el clima se ha trastornado. Bolivia, Venezuela, Paraguay, Perú, Colombia, Ecuador, Argentina, Uruguay y Brasil están afectados por la sequía y recientemente las inundaciones llegaron a ciertas zonas de los tres últimos países.
Los estragos
Colombia también experimenta una sequía. Las afectaciones se presentaron en los cultivos de café, que se enfermaron por el ataque del gusano de la broca, una plaga que acaba con la producción.
En Perú, la falta de lluvias ha impedido la siembra de los productos en las zonas de la Sierra, y faltan pastizales para el ganado. Las regiones más afectadas son Apurimac, Cusco, Arequipa Moquegua y Puno.
Uruguay experimentó los estragos de la sequía en los primeros meses del año. La ganadería y la producción de leche se redujeron. La sequía impidió el crecimiento de la economía al 2,7% como se había previsto.
Los gobiernos declararon en emergencia para afrontar los dos fenómenos climáticos.
La sequía ha sido tan severa que redujo la producción agrícola y ganadera, por la falta de agua y pastizales para las reses.
En Argentina, los incendios afectaron a 10 millones de hectáreas cultivables, que equivalen a un tercio del área de siembra del país, indicó César Rebela, director del Instituto de Clima y Agua del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria.
“Normalmente, el fenómeno de El Niño afecta aumentando precipitaciones en primavera y el otoño siguiente”; sin embargo, las lluvias no llegaron.
Además, el fuego destruyó unas 30 000 hectáreas de pastizales en la provincia argentina de Córdoba (centro). Se considera el mayor desastre en 30 años, según autoridades provinciales.
Los incendios también consumieron otras 40 000 hectáreas en los cerros de l a provincia de Catamarca (noroeste del país), por la falta de lluvias en los últimos seis meses.
Esta situación incidió en la reducción de la producción de trigo, soya y maíz. Por ejemplo, se sembraron 18 millones de hectáreas de soya y no las 18,5 millones que se habían previsto. Habrá que esperar la cosecha para conocer la cantidad que se recolectará frente al año pasado.
En trigo, la situación es alarmante, pues ha sido la peor siembra en los últimos 111 años y se vaticina la peor cosecha de los últimos 30 años, según el sitio mercopress.info.
Se sembraron 3,5 millones de hectáreas, menor a los casi 6 millones de la campaña anterior. Y se espera cosechar 7,5 millones de toneladas y no los 15,2 millones que hubo en 2008.
Esta reducción incidirá en el mercado mundial, con menos oferta y más precio -posiblemente, porque es uno de los cuatro exportadores del mundo. Lo mismo pasa con el maíz, pues se calcula recoger alrededor de 13 millones de toneladas frente a las 20,4 millones de 2008.
Otra situación grave sucedió en Bolivia y Paraguay, donde murieron 16 000 reses por falta de alimento. La sequía afecta a la zona del Chaco boliviano y
paraguayo. En el primer país murieron 11 000 animales (vacas, ovejas y llamas) y se perdieron 20 000 hectáreas de cosechas en los departamentos de Santa Cruz, Tarija y Chuquisaca.
Para evitar más muertes, el Gobierno entre más de 400 toneladas de balanceado y 100 000 fardos de heno de sorgo forrajero. Esta sequía es la peor de los últimos 10 años en Bolivia.
Además, 26 000 familias soportan los estragos, pues han perdido sus cultivos.
En Paraguay, la falta de agua ha puesto en riesgo a 100 000 personas que viven en el Chaco central, entra Argentina y Bolivia. Allí también han muerto 5 000 reses por la escasez de pasto.
Eso ha incidido en la reducción de la producción de 200 000 litros diarios de leche, del más de 1 millón de litros que se producen en ese país.
Venezuela soporta las mismas condiciones climáticas que sus vecinos. Según el presidente de la Asociación de Productores Cerealeros y Ganaderos de Guárico, Vicente Figuera, “la sequía ha afectado entre el 70 y 80% de las siembras de maíz, arroz y sorgo”, pilar de la producción de cereales en ese país.
Eso significará más importaciones de productos alimenticios, pues Venezuela es deficitaria en la producción de alimentos para la población.
En Brasil y Uruguay, las inundaciones afectan ahora a las poblaciones urbanas. Pero un mes atrás la sequía apareció en la región occidental de la Amazonia de Brasil. Ha afectado a 200 000 personas y la zona de Sao Gabriel da Cachoeira, en la frontera con Colombia, quedó aislada porque el río Negro se tornó innavegable, por la reducción del cauce de las aguas.