El sepelio de los tres hombres fue ayer en un ambiente íntimo. Los familiares de Jaime Vega de la Cuadra, de 57 años, y de sus hijos Juan Pablo, de 29, y Sebastián, de 25, prefirieron que ningún extraño asista al funeral, en el camposanto Santa Ana, al este de Cuenca. A las 10:00, un primo de los jóvenes fallecidos se ubicó en la puerta principal de la Sala de Velaciones para impedir el paso de personas ajenas a la familia.En el interior se alcanzó a ver que había pocas personas. “Es un velatorio íntimo”, dijo el primo.
Entre la familia hay silencio, dolor, molestia e indignación. Prefieren no dar declaraciones para evitar especulaciones y que las investigaciones avancen. A ellos les preocupa el paradero de María del Carmen Monsalve, esposa de Vega y madre de los jóvenes.
No aparece desde el viernes pasado. El gobernador de Azuay, Leonardo Berrezueta, y el jefe del Comando de Policía, Rómulo Montalvo, insisten en calificar el caso como un suicidio. El lunes, el primero de ellos incluso pidió que no se emitan falsos comentarios en las redes sociales sobre este caso y que no se vincule con la delincuencia. Incluso, dijo que podían ser llamados a la Fiscalía a testificar sobre sus comentarios.
Esto generó críticas y rechazos. En las redes sociales hay comentarios en contra de las declaraciones de las autoridades. Pedro J., Sebastián P. y Norman S., emitieron sus puntos de vista en la cuenta de Facebook que creó el grupo denominado 50 000 Miembros en Contra de la Delincuencia.
Esta agrupación se formó luego de la Marcha contra la Violencia tras el asesinato del vicepresidente de la Cámara de Comercio de Cuenca, Fausto Malo, ocurrido en febrero pasado. Jaramillo, Pacheco y Saavedra hacen comentarios en contra de la inseguridad y la falta de resultados.
Ayer se conoció otro dato sobre estas muertes. Berrezueta señaló que dentro de las investigaciones se rastrearon las llamadas del celular de Monsalve y se determinó que la última vez que se comunicó con un familiar fue la tarde del viernes. La llamada se hizo desde el sector de Dos Chorreras, en las inmediaciones del Parque Nacional Cajas. Por esa zona atraviesa la vía Cuenca-Molleturo-Naranjal, que une Azuay con Guayas.
Ese mismo viernes, Monsalve depositó USD 33 000 en una cooperativa de ahorro y crédito de la ciudad y cargó combustible en un surtidor, para ello utilizó su tarjeta de crédito. Su desaparición está notificada en todo el país. Según Montalvo, los familiares de Monsalve contaron que ella estaba endeudada en USD 1 millón.
Vega de la Cuadra era hermano de Felipe Vega de la Cuadra, quien en el 2006, durante el mandato de Alfredo Palacios, fue ministro de Gobierno.
Al sepelio del empresario y de sus hijos asistieron autoridades de la ciudad. Cerca de las 13:00 de ayer, tras una ceremonia religiosa fueron sepultados. Esta familia es dueña del negocio Palacio de la Suerte Monsalve, que tiene varios locales en Cuenca. Tiene la distribución de la Lotería Nacional y comercializa libros.
En la Policía también se conoció otro dato. La prueba de parafina reveló que se encontraron restos de pólvora en una de las manos del empresario. No se conocieron los resultados de la autopsia y está pendiente el informe del llamado kit de barrido electrónico que se remitió a Guayaquil.
Este determinará particularidades de los disparos en la ropa y en los cuerpos.
Desde la tarde del martes pasado, la fiscal Margarita Cordero y los agentes de la Policía Judicial allanaron los locales de Palacio de la Suerte Monsalve. Se retiraron los boletos de lotería para evitar falsos rumores, dijo Cordero.
Ayer, estos locales no atendieron. La mayoría de empleados no cree que podría tratarse de un suicidio y parricidio.
Punto de vista
‘Tenemos que hacer presión’
Matías Abad Cámara de Comercio
Han pasado dos meses de la muerte del vicepresidente de la Cámara (Comercio), Fausto Malo y no hay información completa de la Fiscalía ni del Gobernador. Argumentan que no emiten un informe porque podrían entorpecer las investigaciones.
Pero ya pasó un tiempo prudencial y esperamos resultados. Los niveles de delincuencia se han incrementado en Cuenca.
Tenemos que hacer presión con otros movimientos ciudadanos, para pedir a las autoridades que se pase de los estudios, planes y proyectos a acciones concretas para frenar los asesinatos, asaltos e inseguridad.
A la ciudadanía le preocupa y por eso hay un rechazo casi generalizado en las redes sociales.
No entiendo cómo el Gobernador y la Policía se adelantaron a emitir una información oficial (que las muertes no estaban vinculadas con la delincuencia) a pocas horas de los hechos y cuando no se hacía ni la autopsia ni había resultados.
‘La inseguridad crece cada vez’
Milton Pozo / Abogado
La delincuencia avanza cada día más y no hay una solución de fondo. Solo hay medidas parches como la consulta que a mi entender pasarán ocho meses, luego del 7 de mayo, y la inseguridad seguirá igual o peor.
Una solución de fondo pasa por cambiar la actitud de las personas, establecer acuerdos entre las autoridades y la ciudadanía, de unirnos más como cuencanos.
La apreciación de inseguridad es general en Cuenca, probablemente menos que en Quito y Guayaquil que tienen poblaciones más grandes, pero ya se escuchan casos de sicariato, asesinatos, asaltos y robos casi a diario, lo que no veía antes.
No creo en las estadísticas que dicen que hay menos delitos con relación al año anterior. Si fuera así las autoridades de las entidades administradoras de justicia no estarían empeñadas, cada año, en crear más fiscalías y juzgados, porque los profesionales no alcanzan a resolver los casos.