Después de dos semanas, Laura M. recuerda el asalto como si fuera ayer. Desde su oficina, ubicada en Las Casas (norte de Quito), vio cómo los hombres que atracaron una agencia bancaria en el sector huyeron del lugar.
[[OBJECT]]La mujer tiene viva la imagen de José Vidal, quien falleció por un disparo de uno de los desconocidos, que le llegó en la parte posterior de la cabeza. “Vi cuando el hombre salió del banco y se desplomó en la acera luego del disparo. Fue terrible presenciar algo así”, cuenta aún con temor.
El asalto al banco de Las Casas es el sexto en lo que va de este año, según el informe de enero a agosto del Observatorio de Seguridad Ciudadana, hasta agosto se registraron cinco. Ese día, dos policías realizaban control en la zona y se detuvieron al ver una motocicleta estacionada frente a la agencia.
Al percatarse del movimiento de los uniformados, los dos hombres dentro del banco amedrentaron a los clientes y huyeron del lugar dejando dos heridos.
Un informe de la Dirección Nacional de la Policía Judicial señala que en el 2010 se registraron 47 asaltos a bancos en el país.
En el 2009 hubo 61 y en el 2008 sumaron 40, según las estadísticas oficiales. Allí se indica además que las provincias más afectadas por este hecho delictivo son Azuay y Guayas.
En la primera de estas provincias también han sido frecuentes los robos a las cooperativas.
En marzo pasado los mandos de la Policía azuaya señalaron que la institución implementó el “sistema de alarmas de pánico”.
En Quito, las actividades en el sector del robo que vio Laura M. han sido normales a pesar de los temores que existen. Comerciantes y vecinos mencionaron que se acercarían a solicitar más resguardo policial. Sin embargo, la Unidad de Policía Comunitaria del sector no hay ningún escrito.
El Grupo de Operaciones Motorizadas (GOM) es la entidad encargada de realizar patrullajes alrededor de las entidades bancarias en el sector comercial de la capital. 20 cuadrantes dividen la zona centro occidente, en donde se ubican los puntos más conflictivos respecto de robos y asaltos, según la Comandancia.
El GOM también sirve a locales comerciales y domicilios. Son 52 miembros y cinco oficiales al mando de un capitán, que se distribuyen diariamente por el circuito. “Generalmente hay dos policías motorizados por cuadrante. Ellos son quienes dan las alertas a través de la central de radios en caso de ver alguna anomalía en su sector. De esta manera, el resto de departamentos actúan en conjunto para realizar los operativos”, sostiene Carlos Castro, comandante de la Unidad de Vigilancia Centro Occidente.
El coronel afirma que los motorizados circulan por su cuadrante, incluso en las horas de almuerzo y cena. “Ellos coordinan acciones y saben que no pueden dejar de vigilar los establecimientos. Se turnan para almorzar y lo hacen dentro de su mismo cuadrante”.
El pasado 27 de septiembre, en esa Comandancia se coordinaron nuevas acciones considerando el asalto a la agencia de Las Casas.
Se solicitó reforzamiento de los 250 nuevos policías que se incorporaron a las UPC de la capital.
El mapa de acción cambió y se resolvió vigilar a otras entidades bancarias en la zona mercantil.
Son cinco empresas principales y cinco alternas.
Para el director del Observatorio de Seguridad, Daniel Pontón, el robo a bancos no es un tema frecuente sino más bien aislado.
“Por la complejidad de realizar un asalto de esa magnitud y el botín que se podrían llevar, los delincuentes prefieren usar otro tipo de formas”, señala. El experto afirma que estas personas juegan con las estrategias, es decir, que nunca son las mismas. “Estudian los lugares y ven las formas de atacar, que no necesariamente son iguales en todos los casos”.
Pontón menciona que un tema más preocupante es el de los sacapintas. “Pese a las protecciones que han adquirido los bancos: no usar celulares, ni gafas, ni gorras, ellos (los desconocidos) esperan afuera a sus víctimas y las asaltan”. Para él, se debería pensar en dónde se filtra la información. Aunque ante todo se necesita seguir ciertas recomendaciones para evitar de alguna manera ser víctima. “Se pueden cambiar las rutas en el momento de salir, hay que pedir resguardo, pero aun así, en el último minuto, tomar otro camino”, sostiene.
Pero para Laura M., esos mecanismos ya no son suficientes para sentirse seguro. “Dentro del banco les roban, sin siquiera salir a la calle mataron al hombre con su pequeño en brazos. Creo que en esta ocasión ya no hay sugerencia que valga y es mejor que las autoridades busquen las formas de controlar una situación así”. El informe del Observatorio dice que el 41% de robos se produce en el norte de Quito. En lo que va del año se cuentan 3 698 hechos.
Las sugerencias
El Observatorio de Seguridad Ciudadana da algunas sugerencias para evitar ser víctimas de este tipo de delitos: no retirar grandes sumas de dinero de los bancos, pues es preferible realizar transferencias.
En caso de pagar dinero en efectivo se debe procurar no proporcionar esa información para evitar que se filtren los datos que son reservados.
Siempre pedir resguardo de la agencia bancaria y de la Policía para transportar el dinero. Es importante que se cambie de ruta mientras se lleva el dinero.