La Policía Nacional liberó a tres ciudadanos que permanecían secuestrados en el sector de Monte Sinaí, en el norte de Guayaquil.
El rescate comenzó gracias a la alerta de una valiente niña de 9 años, quien presenció el secuestro de uno de sus familiares.
Más noticias
El ECU 911 coordinó de inmediato la búsqueda de la víctima, la madrugada de este lunes 2 de septiembre de 2024.
La Policía recibió la información que el secuestrado era movilizado en un vehículo blanco que ingresó a una vivienda, en el Distrito Nueva Prosperina.
El operativo se desplegó por los sectores de El Fortín, Paraíso de la Flor, Flor de Bastión y Monte Sinaí; lugares donde se realizaron al menos 20 allanamientos.
Finalmente, las autoridades dieron con el paradero del inmueble donde se escondía al secuestrado, Antonio T., de 50 años.
En el lugar, también se encontró a dos mujeres, Mariela L., de 34 años y Ángela S. de 69 años.
Las ciudadanas fueron secuestradas el martes 27 de agosto. Los delincuentes extorsionaban a sus familiares con 100 000 dólares.
Los tres ecuatorianos rescatados se dedican al comercio.
Mujer de la tercera edad fue torturada
Una de las tres víctimas, la ciudadana de la tercera edad, contó como los secuestradores la torturaron en repetidas ocasiones.
Conmocionada por lo que vivió, la mujer relató a la Policía Nacional como los delincuentes no tuvieron compasión por ella, ni por su avanzada edad.
La comerciante aseguró que en los siete días que estuvo en cautiverio, los desconocidos la violentaron de varias formas.
“Me golpeaban en el cuerpo y la cabeza, me prendían los pies con velas, me sacaron una uña, me colgaban del cuello, me amenazaban constantemente”, denunció la víctima.
La mujer afirmó que uno de los secuestrados incluso llegó a tocarle sus genitales.
Por su parte, la otra mujer contó que su secuestro ocurrió durante el encuentro que tuvo con una persona, tras pactar la venta de un terreno.
Operativo dejó seis detenidos
El operativo de rescate permitió la captura de cinco hombres y una mujer.
Los detenidos son: Jayrón C. (24 años con antecedentes penales), Bianka E. (20 años), Joffre C. (46 años) y Steeven A. (21 años).
Y los menores de edad: Washington M. y Anthony A., ambos de 15 años.
Uno de los capturados era considerado de alto valor dentro del Distrito de la Nueva Prosperina por ser uno de los líderes de la organización criminal Los Tiguerones.
“El individuo generaba temor en el sector a través de varios delitos, entre ellos, secuestros, extorsión y microtráfico”, señaló Roberto Santamaría, jefe del Distrito Policial.
Entre los indicios encontrados de la operación constan un chaleco antibalas y cuatro cartuchos de escopeta.
Pedido a la justicia
El uniformado hizo un llamado a la justicia para que se sancione con la máxima pena a los involucrados en el múltiple secuestro.
“Se deberían tomar en cuenta las versiones de las víctimas como prueba principal del hecho, los secuestrados maltrataron a una señora de la tercera edad, no tuvieron ningún respeto“, señaló Santamaría.
Las víctimas del secuestro fueron puestos a buen recaudo con sus familiares.
Mientras que la Policía trasladó a los seis detenidos a la dependencia de la Florida Norte, desde donde fueron entregados a manos de las autoridades competentes.
Detonación ‘controlada’ provocó daños a terceros
Pese a lo que la Policía denominó como un “operativo exitoso”, la situación en Monte Sinaí se complicó horas después.
Luego de varias horas de ejecutada la liberación, los servidores policiales realizaron una “detonación controlada” para destruir la vivienda en la que los secuestrados permanecieron.
Antes que demoler la infraestructura, las autoridades decidieron quemarla utilizando explosivos.
La acción se salió de control, causando que las llamas de la casa objetivo se trasladaran hacia dos viviendas cercanas.
La fuerte explosión se realizó sin la presencia del Cuerpo de Bomberos, lo que generó que en los 10 minutos que demoró su llegada, el fuego contaminara gran parte de las casas de caña adjuntas.
Mientras el angustiante momento ocurría en medio del llanto de la dueña de una de las viviendas, los agentes policiales no reaccionaron a la emergencia; se mostraron incrédulos a lo que estaba pasando.
Finalmente, luego de 15 minutos de comenzado el incendio, las llamas fueron controladas.
La dueña del inmueble y los vecinos se mostraron iracundos contra la Policía por su notable error en la detonación.