El Centro de Detención Provisional (CDP) de Portoviejo Tomás Larrea tiene resguardo militar. Desde ayer efectivos militares que pertenecen al Fuerte Militar Manabí con sede en Portoviejo están a cargo de la seguridad del centro penitenciario. El personal que realizaba el trabajo de seguridad fue notificado que había sido despedido a través de la compra de renuncias.
Son 30 las personas notificadas. Victoria Guamán es una de las removidas de su trabajo. Ella junto a dos compañeros fueron trasladados desde Azogues el 3 de mayo. Nadie sabe porqué hemos sido despedidos, mejor nos hubiesen informado dijo Guamán. Junto a las notificaciones en algunos casos llegaron las liquidaciones.
Ese fue el caso de Jaime Sarango. Con ocho años de trabajo recibió una liquidación de USD 11 000. Ayer por la mañana también arribaron 27 nuevos miembros del personal de seguridad que fueron preparados hace seis meses en la Escuela Politécnica del Ejército (ESPE). El resguardo será hasta el miércoles según comunicó uno de los militares.