En su cartera, Rosa Utreras lleva una foto en la que aparecen cuatro médicos vestidos con trajes de camuflaje verde, junto a un agujero gigante en medio de la selva. Para ella, esa es una prueba de que participó en las brigadas médicas de la Guerra del Cenepa.
La mujer de 51 años se graduó como asistente quirúrgica en la U. Central hace 30 años y desde ese tiempo ha trabajado en el Hospital Militar de Quito. Ella acompaña a los representantes de la Asociación de ex combatientes de la Guerra en las protestas contra el listado de beneficiarios de la Ley de Héroes elaborado por el Ministerio de Defensa que fue entregado al Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (Cpccs). Su objetivo es que los médicos que ayudaron en el conflicto bélico sean reconocidos.
Rosa cuenta que los doctores, enfermeras y asistentes que colaboraron en la guerra no fueron tomados en cuenta por las autoridades. Ella cita que los médicos ni siquiera constan en la lista elaborada por Defensa. Como prueba, muestra los certificados entregados por los altos mandos militares de ese tiempo al personal médico que estuvo en la guerra.
Por ejemplo, en un documento suscrito el 25 de agosto de 1995, el comandante de la Fuerza Terrestre certificó que la doctora Elvia Moreta asistió al personal médico militar como psiquiatra. Lo mismo ocurre con el médico Jorge Ortiz y Teresa Pila, quien se trasladó a Zamora Chinchipe para colaborar en las cirugías. Ellos no constan en la lista de beneficiarios de la ley.
A eso se suma que, a través del decreto ejecutivo 232738, el Hospital General de las FF.AA. fue condecorado con el estandarte Cruz de Mérito de Guerra el 18 de mayo de 1995. Ese reconocimiento es contradictorio, según Utreras. “¿Cómo puede ser posible que el centro de salud sea reconocido y los médicos no?”.
El artículo 1 de la Ley de Héroes reconoce como héroes y heroínas a los ciudadanos que hayan realizado actos únicos, verificables, “más allá del comportamiento normal esperado y del estricto cumplimiento del deber, aún a riesgo de su propia integridad, salvando vidas, protegiendo las instituciones establecidas por nuestra Constitución o defendiendo la integridad territorial”.
Una lista de 36 profesionales (14 doctores, 12 enfermeras y 10 asistentes) que participaron en las brigadas médicas en el conflicto bélico, elaborada por el Hospital General de las FF.AA., no consta en el listado de Defensa. El documento fue remitido el 13 de enero del 2012 por la coordinadora de la gestión de enfermería, Estela Dillon.
Otro caso es el de Yolanda Armijos, quien cuenta que estuvo en la Guerra como enfermera. Ella pide que los médicos sean reconocidos en la lista. “Tuve que dejar a mi familia para ir a la frontera y atender a los heridos. Recuerdo que escuchábamos los tiroteos por aire y por tierra. Solo pedimos que se reconozca a quienes estuvimos allí”, dice.
Ella participará en la protesta que se realizará, a las 10:00 de hoy, frente al Palacio de Gobierno. Según Juan Llasha, presidente de la Asociación de ex combatientes, en la manifestación estarán ellos y sus familiares.
Uno de los pedidos de la protesta es que los médicos, enfermeras, radiólogos, laboratoristas, auxiliares de enfermería e instrumentistas sean reconocidos en la nómina de beneficiarios. De hecho, en un oficio que tiene sellos de Carondelet, remitido el 16 de noviembre del 2011 por el asesor presidencial, Mario Latorre, se solicita que se “reconozcan los beneficios a los soldados y civiles (entre otros al personal de salud del Hospital de las FF.AA.) que cumplieron su deber patrio en la Guerra de 1995 (…)”.
Cerca de 9 000 se movilizaron durante el conflicto entre militares, reservistas, civiles entre los que consta el personal de salud. Pero el Comandante de la Fuerza Terrestre suscribió en mayo de 1995 que los militares que “participaron real y efectivamente en el conflicto” fueron 5 481 efectivos de la Brigada de Selva 21 Cóndor y de la Brigada Alfaro. En ese documento tampoco aparecen médicos y constan 3 171 voluntarios (tropa), 839 conscriptos, 788 reservistas, 377 oficiales, 246 aspirantes, 28 voluntarios en servicio pasivo, 26 empleados civiles, cinco cadetes y un civil.
La cronología
9 enero 1995
Se produce un cruce de balas en el Alto Cenepa, entre patrullas de los ejércitos de Perú y de Ecuador. Luego de escaramuzas, los dos países movilizan tropas a la frontera común.
17 febrero 1995
Ante delegados de EE.UU., Brasil, Chile y Argentina se creó la Momep (Military Observer Mission, Ecuador Perú), encargada de supervisar el cumplimiento del alto al fuego.
22 febrero 1995
El ‘Miércoles Negro’. El Ejército ecuatoriano reportó las muertes de 13 soldados, en El Maizal. Tras el ataque, el conflicto recrudeció y Ecuador volvió a controlar Tiwintza.
24 septiembre 1998
Se firma la paz. Los presidentes Alberto Fujimori, de Perú, y Jamil Mahuad, de Ecuador, se dieron la mano en Brasilia. Se resolvió que la cordillera del Cóndor pertenece a Perú. Ecuador recibió un kilómetro cuadrado en Tiwintza.
9 marzo 2011
La Ley de Reconocimiento a los Héroes y Heroínas Nacionales entró en vigencia. En esa normativa se establecieron beneficios para los ciudadanos que defendieron la dignidad, soberanía e integridad territorial.