Sobre la calle Joaquín Mancheno dos grupos de personas se apostaron minutos antes de que se inicie la audiencia preparatoria de juicio por el femicidio de María Belén Bernal. Efectivos de la Policía Nacional resguardan el edificio que previamente fue vallado.
De un lado, los colectivos feministas reclaman justicia y aseguran que permanecerán vigilantes al proceso. Junto a ellos permaneció Elizabeth Otavalo, madre de Bernal.
Antes de entrar a la diligencia dijo que el teniente Alfonso Camacho, también procesado, tiene responsabilidad en el crimen. “Él como policía nacional debió activarse y evitar que maten a mi hija”, apuntó.
Sobre el mismo implicado habló Jesús López, abogado de la familia de Bernal, quien aseguró que existen suficientes elementos de convicción que se presentarán ante el juez. Pero no adelantó la posibilidad de que Camacho sea sobreseído.
“Será decisión del juez”, dijo frente a los medios minutos antes de la audiencia preparatoria de juicio. Al finalizar, se conocerá si alguno de los sospechosos es llamado a juicio.
Del otro lado de los colectivos sociales, también estuvieron presentes familiares y amigos del teniente Camacho. Vestidos de blanco y con pancartas gritaban en su defensa.
De acuerdo con su madre, Olga Viscarra, no existió omisión por parte del servidor policial. “Mi hijo es inocente, dice la verdad”, alega.
Según su versión, el teniente habría reportado los hechos de violencia que escuchó. También respondió a acusaciones de Otavalo, “no hemos pagado nada como dice la señora, porque mi hijo es inocente”.
Mientras tanto la audiencia se inició a las 10:00 para conocer si pasa a la siguiente etapa. También puede haber un dictamen diferenciado para cada uno de los implicados.
Germán Cáceres confesó el crimen
Germán Cáceres, esposo de María Belén Bernal, fue capturado en Palomino, al norte de Colombia, el 30 de diciembre de 2022. Permanecía prófugo al ser requerido por la justicia ecuatoriana.
El 3 de enero de 2023 fue trasladado al país y un juez dispuso su traslado a la cárcel de La Roca, en Guayaquil.
Cáceres confesó desde allí haber matado y enterrado solo a su esposa María Belén Bernal. El cuerpo fue encontrado en el cerro Casitagua 10 días después de su desaparición.
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