A las 05:30 de este lunes, Nazareno C. llegó al Comando de Policía de Esmeraldas. Había cientos de personas en los alrededores a esa hora. Hacían fila para conseguir un turno que, a su vez, les permitiera recuperar las joyas que fueron retenidas por la Fiscalía, dentro de un caso por supuesto lavado de activos.
La atención comenzó a las 10:00. La Policía colocó mesas plásticas para tomar los datos de las personas. El sol pegaba fuerte en sus brazos y cuellos. Habían dejado sus joyas en 12 locales de compraventas que fueron cerrados el pasado 30 de enero. Entonces se desarrolló un operativo policial simultáneo en Esmeraldas y Pichincha.
Solo en la provincia de Esmeraldas participaron 150 efectivos de las unidades de élite. Nazareno C fue una de las primeras personas en recibir sus joyas. Las había empeñado el pasado 12 de enero, por USD 600. “Pesé que las perderías, porque ya han pasado cinco meses”, dijo mientras sostenía la bolsa plástica con sus cadenas y anillos. Él no tuvo que pagar por la devolución.
Hasta las 15:30, se entregaron 126 turnos y se atendieron a 50 personas. Eso molestó a los afectados, que demandaron prontitud. La mayoría deberá hasta el próximo lunes para retirar sus prendas. Solo se atendió a quienes tuvieron joyas en compraventa Las Palmas (la más grande con 2 200 clientes) y cuyos números de la cédula terminaban en 0 y 1. Se calcula que el total de afectados suma 30 000.
Unos 20 policías controlaron el ingreso de los ex clientes agolpados en la garita de ingreso al cuartel de la Policía. El tránsito vehicular se obstruyó por minutos. 15 técnicos de la Fiscalía y Policía Judicial tomaron los datos en ocho computadoras; ahí revisaban los documentos habilitantes para retirar las alhajas. Los acreedores debían presentar el contrato de venta, declaración notarial, título de las joyas si lo tuviere, y copias de la cédula de identidad. El proceso de revisión tardaba hasta 30 minutos, según Nazareno C.
El fiscal Lenin Pérez, quien investiga el caso, dijo que solo se entregaron joyas a quienes realizaron el proceso de compraventa en los últimos cuatro meses. Sin embargo, había clientes que tenían joyas con plazo de vencimiento de seis meses. El vocero de los perjudicados, Mario Gutiérrez, exigió que se devuelvan todas las prenda y pidió que se monte una veeduría ciudadana. El fiscal Pérez se negó.
La instrucción fiscal, por el presunto delito de lavado de activo está por terminar. Los 19 detenidos tras el operativo del 30 de enero están libres bajo medidas sustitutivas, de acuerdo con el Juzgador Tercero de Garantías Penales de Esmeraldas. Representantes de los locales de compraventa preparaban la presentación de una Acción de Protección para detener el proceso de entrega. Ellos dicen que han actuado con base a la Ley.
Este lunes, la Policía montó un dispositivo alrededor del cuartel con personal vestido de civil y uniformados. La finalidad: brindar seguridad a las personas que retiraban sus joyas. Holger D. recuperó USD 4 000 en oro. Él empeñó sus joyas para cubrir una emergencia económica. “Cuando me enteré del cierre por poco voy a parar al hospital. Las alhajas que empeñé son parte de un patrimonio familiar”. La devolución se hará primero en Esmeraldas, luego en el resto de cantones; San Lorenzo, Atacames y Quinindé.