Estaban reportados como desaparecidos, pero los agentes los identificaron posteriormente.
La desaparición de Christian R. fue denunciada en el 2011 tanto por la madre como por la conviviente. No obstante, los dos reportes fueron archivados por la Fiscalía a mediados del 2013. Los agentes responsables del hallazgo recurrieron al Área de Archivo de esa institución para solicitar información de los familiares del fallecido y posteriormente lo entregaron.
En este momento, los familiares de la víctima vivían en El Oro y desde allí se trasladaron a El Oro para recibir los restos de Christian R.
El caso de Alfredo M. es similar. El hombre fue reportado como desaparecido por primera vez el 12 de octubre de 2013. Sin embargo, ocho días después de aquella fecha él regresó a su domicilio por sus propios medios.
La segunda vez que desapareció, su familia ya no realizó ninguna denuncia, asumiendo que volvería.
El hombre habría fallecido el 30 de noviembre de 2013 en un accidente de tránsito. Para informar a la familia, los investigadores recurrieron a la primera denuncia para obtener datos de contacto. Un hermano del muerto se acercó a Medicina Legal para confirmar la identidad e iniciar el proceso de entrega de los restos.
Datos estadísticos de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (Dinased) revelan que del universo de desapariciones el 91% corresponde a un alejamiento consciente de las personas del entorno familiar.
El 9% por motivos de discapacidad o enfermedades mentales. El 7% por accidentes y el 2% por causas forzadas.