Martha C. caminaba de un lado a otro junto al portón negro de la morgue, a la espera del cuerpo de su familiar, Rosa C., de 36 años. La mujer fue asesinada el jueves junto a su conviviente, Manuel B., de 47 años. Los dos cuerpos fueron hallados en San Antonio, en el norte de Quito DM. “No retornaron a la casa la tarde del miércoles”, señaló la mujer. Los familiares preocupados llamaron a sus teléfonos celulares, “pero ninguno contestó. Esperamos hasta el jueves y seguimos con la búsqueda”. A las 09:45, una llamada telefónica de la Policía les alertó del doble asesinato. Los cuerpos estaban en un automotor Nissan Patrol verde (1979), que ocupaban a diario. Personal de Criminalística reportó el hallazgo en el sector de Tangua, camino a las canteras. La ropa de los fallecidos estaba empapada de sangre, al igual que los asientos y la tapicería del automotor, que quedó abandonado a un lado de la vía lastrada. “Los cuerpos tenían señales de tortura”, informó una fuente de la Policía. Manuel B. tenía una herida profunda en el cuello y en el abdomen. Rosa C. fue disparada tres veces: en el cuello, la cabeza y el abdomen. En el vehículo se halló un revólver calibre 38 y un cuchillo. Las evidencias fueron recabadas por los técnicos de Criminalística. Se realizará un examen de balística para determinar si el arma hallada corresponde a la usada para el crimen contra la mujer. Los agentes también tomaron las huellas dactilares de la pareja para constatar si manipularon el arma de fuego. Ayer, Víctor Hugo Baquero, jefe de la Policía Judicial de Pichincha, expresó que las investigaciones siguen y prefirió no emitir ninguna versión sobre este caso. La búsqueda de el o los responsables de los crímenes se concentra en los alrededores de San Antonio de Pichincha. Martha C., hermana de la víctima, refirió ayer que su hermana tenía problemas con Manuel B., por sus celos. “Le decíamos que lo dejara y que mejor se dedique a sus dos hijos, que tuvo de un compromiso anterior”. Agentes de la Policía sospechan que se trató de una posible venganza. El ex esposo de Rosa C. fue asesinado en un confuso incidente. Con su actual pareja, la mujer convivió por siete años, pero hubo separaciones. En los últimos meses los problemas se agudizaron y Rosa C. comentó a sus hermanas que era maltratada. Ayer, cerca de las 12:45, Martha C. tuvo autorización para retirar el cadáver de su hermana, para trasladarlo hasta Calacalí. Ahí se iba a levantar la capilla ardiente.