Familiares y amigos de los ciudadanos cubanos afuera del Hotel Carrión. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
El viceministro del Interior, Diego Fuentes, se refirió a la situación de los migrantes cubanos que fueron desalojados, primero, de los exteriores de la Embajada de México y, luego, detenidos tras un operativo similar realizado en el parque El Arbolito. 151 personas fueron detenidas y puestas a órdenes de las autoridades; de estas 75 personas han sido deportadas.
En entrevista en Radio Vigía, la mañana de este martes 12 de julio, el funcionario señaló que estas acciones se enmarcan dentro de los controles migratorios que se realizan en el país, “para desarticular estas redes dedicadas al tráfico de personas y que se han respetado los derechos de cada persona”.
El Viceministro precisó que se debe hacer respetar la ley. “Esto no se trata de la ciudadanía cubana, se trata de un control migratorio que se realiza a todos los ciudadanos y a todas las nacionalidades. Creo que eso sostiene un flujo migratorio regular y responsable. Y que no se abuse del derecho ni de la figura universal de la ciudadanía universal y de puertas abiertas que tiene el Ecuador para hacer entrar a las redes de crímenes organizado o trata de personas”.
Fuentes recordó que los ciudadanos cubanos iniciaron acciones de presión para solicitar una visa humanitaria para llegar a Estados Unidos. Para esto, dijo, armaron entre 120 y 130 carpas en los exteriores de la Embajada de México, en el norte de Quito. Esto significaba una alteración del orden público. Por esta razón se realizó un operativo “para mover a las personas, para mantener la seguridad en los exteriores de la Embajada”. Esto ocurrió el 26 de junio pasado.
La autoridad señaló que, en una primera instancia, se les notificó a los ciudadanos cubanos que no podían acampar en las afueras de la Embajada y que la Policía Nacional actuó de forma mesurada para garantizar el orden público. Actuó, también, personal del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES) y policías especializados en menores y adolescentes (Dinapen).
También, mencionó, que se debe desmentir “esa historia ficticia que se quiere generar en el sentido de que las personas que lleguen a Cuba serán apresadas o que serán sujetas a algún tipo de acto inhumano. Nosotros demostraremos, en su momento, cómo esas personas llegan a su país de origen y son transportadas a los lugares donde estaban habitualmente domiciliadas. Hemos trabajado con el Consulado y la Embajada de Cuba”.
Por último, recordó que se ha implementado una visa que permite regularizar y controlar el flujo de los ciudadanos cubanos. Cada estado tiene la capacidad soberana de adoptar su política migratoria y las que estamos adoptando no están por fuera de los estándares o políticas que otros países han realizado. Como por ejemplo lo que ocurrió en Colombia”.