Exteriores del Hospital del Suburbio de Guayaquil, donde está asilado Daniel Salcedo. Foto: Enrique Pesantes/ EL COMERCIO
El peritaje médico que la Fiscalía le practicó a Daniel Salcedo, procesado por hechos de corrupción en los hospitales públicos de Guayaquil, ha revelado nuevos datos de su estado de salud.
Según el documento, que se levantó con base en el expediente médico de 362 hojas, el paciente no presenta “problemas de memoria, lenguaje, pensamiento o sensopercepciones”.
Por tal motivo, la primera conclusión del informe es que “las funciones mentales cerebrales se encuentran restituidas”.
En la segunda conclusión, el perito señala que Salcedo presenta “varios intentos de autolesionarse”.
Por eso indica que se “debería pensar en la posibilidad de aumentar su estadía hospitalaria”.
En el informe se detalla al menos cinco episodios en que Salcedo atentó contra su salud desde que ingresó al hospital Abel Gilber Pontón, el pasado 10 de junio del 2020.
Entre los antecedentes de estos hechos se indica que un día él se retiró “con sus propias manos el tubo de tórax colocado para drenaje torácico”.
También se añade que durante una guardia “se lo ha mantenido con medios de sujeción (aparatos para sujetarlo a la cama)”, porque “se despierta de forma irritable” y se le ha dado un analgésico.
En el documento se dice que además se le administró fármacos para tratar trastornos psicóticos.
En los informes médicos se indica que Salcedo además se “autoretiró la vía central” del medicamento.
En esa ocasión los médicos tuvieron que sedarlo. Otro día, en cambio, se arrancó la sonda vesical.
En el hospital existen informes que catalogan al procesado como un paciente “intranquilo e irritable”.
Por todos estos hechos, en una de sus recomendaciones el perito indica que se debe “restringir” el ingreso de alimentos, objetos y visitas.
También indica que se debe mantener una permanencia continua de un agente policial para vigilarlo.
Otra de las conclusiones del perito es que es “innecesario e ilegítimo”, que Salcedo permanezca en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital.
Pese a todos estos detalles, el perito de la Fiscalía también indica que Salcedo fue sometido a una intervención quirúrgica de injerto de piel y que una vez se pueda constatar la vitalidad y la adherencia del mismo, “el paciente estaría en condiciones de manejo ambulatorio y control por consulta externa (alta hospitalaria), bajo cuidado de consulta externa y valoración diaria por cirugía plástica”.
Según el perito, esta última conclusión se podría cumplir luego de que se constate que las secuelas de la cirugía estén controladas.
El informe pericial fue presentado el domingo, 26 de julio del 2020, a la fiscal del caso Claudia Romero.
Ahora, el documento será analizado por un juez para determinar si se ordena el traslado del procesado a la Cárcel 4 de Quito.
En ese centro carcelario permanecerá detenido hasta que todos los procesos legales se resuelvan.
Salcedo es investigado por los presuntos delitos de asociación ilícita, lavado de activos, peculado y fraude procesal.