Desmejora salud de huelguistas que piden libertad de familiares en Nicaragua

En la ciudad de Masaya, en Nicaragua, hay agentes antidisturbios controlando la huelga de hambre. Foto: EFE

En la ciudad de Masaya, en Nicaragua, hay agentes antidisturbios controlando la huelga de hambre. Foto: EFE

Las madres de los presos políticos en Nicaragua iniciaron una huelga de hambre. Foto: EFE

La salud de unas 11 mujeres nicaragüenses en huelga de hambre en una iglesia que demandan libertad para sus familiares detenidos por protestar comenzaba a deteriorarse este sábado, luego de tres días de ayuno, dijeron fuentes eclesiales y afectados.

Deshidratación, debilidad y descompensación por padecimientos como asma, diabetes y problemas de columna presentaban las huelguistas, dijo a la AFP la abogada Yonarki Martínez, que está dentro de la iglesia San Miguel, de la ciudad de Masaya, al sureste de Managua.

Las 11 mujeres se declararon en huelga de hambre como parte de la campaña “Navidad sin presos políticos” que exige la libertad para 139 detenidos por participar en las protestas contra el gobierno de Daniel Ortega que estallaron en abril de 2018.

Las huelguistas quedaron acompañadas por otras cinco personas, entre ellos Martínez y el sacerdote de la iglesia San Miguel, Edwin Román, quienes quedaron atrapados en el templo, tras ser cercado por equipos antimotines que impiden la entrada o salida del lugar.

El clérigo escribió en Twitter que las mujeres “continúan orando y en huelga, exigiendo la libertad de los presos políticos” y que “aún están rodeados [por la policía], sin agua, sin luz, sin víveres ni medicinas y amenazados. Exigimos respeten nuestras vidas”.

Martínez denunció que por la noche los agentes golpean las puertas y les amenazan con desalojarlos del templo, lo que aumenta la tensión entre los que están dentro del local.

Al menos 13 líderes sociales, entre ellos la estudiante belga nicaragüense Amaya Coppens, fueron detenidos la noche del jueves cuando se dirigían a Masaya a llevar agua a los huelguistas.

Las autoridades no han dicho las condición de su arresto.

La embajada de Bélgica en Panamá, anunció que está en contacto con las autoridades para investigar sobre el arresto de Coppens y prestarle asistencia por los canales diplomáticos.

En la ciudad de Masaya, en Nicaragua, hay agentes antidisturbios controlando la huelga de hambre. Foto: EFE

El secretario Ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Paulo Abrao, dijo en Twitter que se comunicó con las huelguistas y le expusieron las condiciones en que se encuentran.

“Urge ingreso de agua potable, alimento para los que no están en huelga. Continuar sin agua, sin luz, rodeados de policías y amenazados por militantes del gobierno es trato cruel e inhumano. Lesiona al derecho a la protesta, a la libertad religiosa y la integridad”, escribió.

En tanto, el gobierno de España solicitó “el levantamiento inmediato del asedio policial al que están sometidos” en la iglesia de San Miguel “el párroco y los fieles que le acompañan”, según un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Madrid también expresó preocupación por las “recientes detenciones de más de 13 ciudadanos nicaragüenses”.

Las protestas comenzaron en abril de 2018 contra una reforma a la seguridad social y derivaron en pedidos de renuncia a Ortega y su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo.

Organismos de derechos humanos estiman que la represión de las protestas dejó 325 muertos, cientos de encarcelados y 62.500 exiliados.

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