Las fuertes lluvias causaron estragos en los barrios Yanahuaico y La Providencia de Amaguaña, una parroquia rural de 31 079 habitantes que se ubica en sur oriente de Quito.
“No se registran heridos, pero sí viviendas y vehículos afectados“, informó el Cuerpo de Bomberos (CBQ) en su cuenta de Twitter. La emergencia fue atendida por 11 efectivos, quienes acudieron de inmediato a los puntos afectados para ayudar a la gente.
En su reporte, la entidad informó que, a causa de las fuertes precipitaciones, se produjo el desbordamiento de un río, lo cual provocó una inundación. “Un vehículo quedó atrapado en la vía, lo remolcamos y dejamos al ciudadano y a su carro en condiciones seguras”.
El personal de Bomberos brindó seguridad en la zona e informó a los moradores que el caudal del agua bajó con fuerza. Los vecinos recordaron que las lluvias comenzaron aproximadamente a las 16:30 y se formó un río en la calle Celso Washington que se conecta con la avenida Huancavilca, en el barrio Yanahuaico.
La gente estaba consternada porque el 5 de diciembre también hubo fuertes precipitaciones y 18 carros fueron arrastrados. La fuerza del agua causó afectaciones de diferente grado en más de 20 viviendas, informó en aquel entonces el subteniente Eddy Chiquilín, del Cuerpo de Bomberos de Quito (CBQ).
La entidad acotó que rescató a cerca de siete personas que fueron arrastradas. Asimismo se conoció que 23 fueron evacuadas de casas y carros atrapados.
La mañana de este miércoles 29 de diciembre del 2021 los vecinos comentaban con preocupación lo que pasó ayer por la tarde y pidieron a las autoridades que les ayuden con la repavimentación de la calle Celso Washington, en donde se formó un río que acumuló lodo, piedra, escombros y basura.
“Bajó abundante agua desde los barrios de Cataguango y Carapungo Alto. Por favor pido a las autoridades que limpien la acequia del sector de San Carlos”, dijo Dolores Pilaguano.
En la vivienda de Luis Pachacama no ingresó agua, pero recordó que las propiedades más afectadas se ubican en la avenida Huancavilca. En algunos locales comerciales alcanzó una altura que superó los 20 centímetros. “Este problema lo vivimos desde hace mucho tiempo”.
Rosario Loya contó que por las lluvias del 5 de diciembre se le dañaron dos lavadoras y una refrigeradora. Algunos enseres flotaron en medio del agua. Con las precipitaciones de ayer perdió las cosechas de maíz. “Nadie nos ayuda”.