Una larga fila se formó este miércoles 15 de febrero de 2023 antes de la subasta del Aeropuerto de Quito, organizada por la Empresa de Servicios Aeroportuarios. Los participantes esperaban el ingreso del segundo piso del edificio de Quiport, en la terminal aérea, al nororiente de la capital.
La fila de los asistentes se extendió hasta el centro comercial, frente al Aeropuerto Mariscal Sucre. Había aproximadamente unas 500 personas que esperaban formados, incluso, en el patio de comidas. Luego, el número aumentó. Los participantes aguardaban un turno para que les entreguen un rótulo con un número, con el cual pujaron en la subasta.
La asignación de cupos para la subasta se realizaba de manera organizada, según el orden de espera. Los interesados llegaron en búsqueda de algunos de los 3 500 artículos fueron abandonados en las salas de espera y otros espacios del Aeropuerto de Quito.
Los objetos están divididos en nueve categorías: joyería y relojes, prendas de vestir, correas; accesorios: lentes, gafas, cobijas, libros, almohadas, tomatodos; cartucheras, monederos, billeteras, maletas, bolsos. Además, coches de bebés, juguetes, patines, patinetas, muñecas; tecnología: tabletas, laptops, cables, celulares, accesorios, smartwatch y la lista concluye con varios, entre los que están: linternas, paraguas, bastones y trajes de lluvia.
Las personas interesadas se registraron de forma gratuita y con la cédula entre las 08:00 y 09:30. Luego, acudieron a la puja a las 10:00.
Los objetos a subastar estaban en la bodega de Objetos olvidados. Allí fueron expuestos para que los participantes los observen.
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