Al suroriente de Quito está la reserva ecológica de El Molinuco, en Píntag. A este lugar se ingresa a través del puente del río Pita. Hay varios senderos con piedras, tierra, agua y escalinatas de madera rústica, que conducen a la cascada que bautiza a la reserva.
Para los viajeros más aventureros, hay la posibilidad de lanzarse de la cascada de 5 metros de altura y nadar en la fosa de agua muy fría. También se puede pasear a caballo, para apreciar la belleza natural del sector desde otra perspectiva. En esta zona se puede hacer pesca deportiva y luego preparar las truchas. También puede visitar el mirador, para apreciar el Pasochoa, el Antisana, el Cayambe y el Cotopaxi.