Caminar en dos patas, saludar, saltar obstáculos, proteger las pertenencias de sus dueños son algunos de los trucos que Jorge Vilatuña enseña a 14 perros. Lo hace, todos los días, en el parque Santa Clara, uno de los más grandes de Sangolquí.
Desde las 09:00 hasta las 12:00, este hombre de 78 años traslada a estos animales a este espacio, para ejecutar los ejercicios. Esto lo realiza en compañía de sus dos ayudantes. Uno es su sobrino, quien, poco a poco, aprende las palabras clave y los movimientos exactos para que los canes realicen determinados movimientos.
Los animales son trasladados desde sus hogares en los diferentes puntos de Sangolquí y también desde Quito. Este entrenador enseña a perros de todo tamaño y raza. Tiene grandes como los pitbull, y pequeños como los schnauzer.
Jorge Vilatuña cuenta que realiza esta actividad desde hace más de 25 años. Él perteneció a las Fuerzas Armadas y allí hizo un curso de adiestramiento canino. Además, esta actividad le resulta divertida y gratificante.
Los peatones que circulan por este parque se detienen para mirar a los perros. Uno de los más aplaudidos es Rex. Este pastor alemán asombra a los transeúntes, ya que salta los obstáculos. Otro de los cotizados es Matías, un schnauzer, al que le encanta caminar y saltar en dos patas.
Vilatuña educa a sus amigos (como denomina a los perros) para que se comporten en la calle y en la casa. El entrenamiento tiene un tiempo de duración de dos meses.
Por fuera a lo que demandan los costos, para los dueños de las mascotas, lo más importante es tener animales que sean compañía y no den problemas en espacios abiertos.
La próxima semana, Marco Almeida llevará a sus dos a esta escuela de adiestramiento.