El alcalde de Quito, Augusto Barrera, informó que está listo un acuerdo ministerial para que el Cabildo maneje la operatividad de la Policía de Tránsito
El Municipio de Quito sigue barajando alternativas para conseguir recursos para financiar el plan vial. Mientras el debate avanza, la movilidad se complica más en la ciudad. ¿Cuáles serán las acciones más inmediatas?
Está listo un acuerdo ministerial para que el Municipio asuma la operatividad de la Policía de Tránsito. Aspiro a que entre en vigencia en los próximos ocho días, máximo. Actualmente, no tengo control sobre ese cuerpo policial, pero paradójicamente soy el responsable de la movilidad en la ciudad. Sin plata y sin capacidad de control, no puedo dar soluciones efectivas. Asumo la responsabilidad con las herramientas necesarias.
¿Es decir que el Comandante General de la Policía ya no decidirá sobre la planificación del tránsito en el Distrito Metropolitano?Esa es la idea. El proceso se lo hará en dos fases. En la primera, el Municipio asumirá el control operativo y en la segunda, se integrará un cuerpo diferente de agentes de tránsito para la ciudad. Para esto se reclutará al nuevo personal para luego formarlo y capacitarlo. Aspiro a que en no más de un año, el Distrito tenga su propia Policía de Tránsito.
¿Y sobre las sanciones?
El planteamiento es que podamos transformar la contravención de tránsito en una contravención de orden administrativo. Eso le permitirá al Municipio establecer multas como ahora lo hace cuando una construcción no cumple con los requisitos exigidos. Estas decisiones me permitirán ejercer autoridad.
Usted desistió de la idea de fijar una tasa para el consumo de la gasolina en Quito. ¿Fue un globo de ensayo político para proponer una eliminación de subsidios a escala nacional?Si yo me prestaría para globos de ensayo, realmente, sería un mamarracho. Di marcha atrás porque empecé a ver una lógica especulativa nefasta. La medida no estaba aprobada y en los mercados ya se veía el impacto. También hubo una visión de carácter regionalista. Yo no pido permiso para hacer mis planteamientos. He hablado con el Presidente (Rafael Correa) de esto desde un punto de vista conceptual.
Por ejemplo’
De lo relacionado con el Yasuní. Por tener ese petróleo bajo tierra se aspira a captar USD 3 500 millones, pero en el subsidio al combustible el Estado gasta USD 3 000 millones. Voy a seguir planteando el análisis del subsidio, pero desde una visión nacional.
Ya sin la tasa a la gasolina, ¿cuáles son las otras propuestas de financiamiento para el plan vial?Reorientar parte de los recursos de la renegociación del aeropuerto. No se puede destinar todo, porque hay que desarrollar la zona franca. Necesitamos construir una pedagogía del debate y del diálogo, para llegar a acuerdos básicos. Definitivamente, mi modelo de gobierno es de concertación y no de imposición.
¿Por qué no se priorizó el debate ciudadano antes de definir el plan vial?
Lo he venido anunciando en los medios de comunicación, pero al inicio no se le dio la importancia debida. He ratificado la decisión del metro y de mejorar los cinco corredores de transporte masivo. Para lo último necesitamos USD 260 millones, para repotenciación de los articulados y comprar más unidades. El trole ha funcionado bien, pero ya es tiempo de renovarlo y mejorarlo.El aporte del Gobierno será importante para concretar estos proyectos…
La presión ciudadana ayudó un poco. Por fin, el Ministerio de Obras Públicas suscribió la ampliación de la Panamericana Norte y de la vía Tambillo-Colibrí- Santa Rosa de Cusubamba. Estas dos carreteras facilitarán enormemente el acceso al aeropuerto de Tababela.