Mariana Santos llegó ayer rezando a su heladería ubicada en la calle Guayaquil. Esta madre de familia esperaba que el servicio de energía eléctrica, que fue suspendido el lunes, se haya restablecido.
“Afortunadamente, este día sí podré trabajar. El lunes fue uno de pérdidas económicas”.
Ayer, el servicio de energía eléctrica se restableció con normalidad en todo el sector del centro, que se afectó con la explosión de una caja de revisión subterránea ubicada en la calle Guayaquil, frente a la plaza de San Blas.
Si embargo, este incidente todavía deja secuelas y los trabajos en la caja de revisión, que esta destruida, continúan.
Los semáforos, por ejemplo, aún no funcionan, porque la caja del cerebro que los coordina no ha sido arreglada. A las 11:00, personal del Municipio reparaba los circuitos. Uno de ellos, que pidió la reserva de su nombre, dijo que no se sabe con exactitud cuándo volverán a funcionar.
Esto provocó que los aparatos de la calle Guayaquil, que organizan el tránsito en sentido norte-sur y los de la calle Pichincha estén inhabilitados. Por eso, ayer había mucha congestión en ese sector del centro.
A las 11:30 no había policías de tránsito en la calle Guayaquil. La circulación se complicó más porque el carril exclusivo del trole sigue interrumpido en un tramo de 20 m. Los articulados tienen que ir por el carril convencional.
En las horas pico, el tránsito se vuelve insoportable, según Mariano Manzano. Él, todos los días regresa a su casa ubicada en el sector de Santo Domingo. “Desde el lunes regresar a mi casa por esta calle (Guayaquil) se ha vuelto un martirio, tendré que buscar vías alternas para evitar el tráfico”.
A 4 m del cerebro de coordinación de los semáforos, obreros de la Empresa Eléctrica realizaban verificaciones técnicas, a las 12:00. El propósito era establecer las causas de la explosión e identificar los daños, para luego realizar las reparaciones.
Según un comunicado de la Empresa Eléctrica, por tratarse de redes subterráneas, fue necesario realizar la apertura de las veredas en el sitio donde se produjo el daño. Estaba previsto que los trabajos de reparación concluyan la tarde de ayer.
Mariana Garcés, dueña de una farmacia, vive 18 años en el sector y afirma que los problemas en la caja de revisión empezaron desde que se ejecutó la remodelación de la plaza San Blas. “Desde entonces, los cortes de energía eléctrica son más comunes”.
Ella recuerda que hace un año, un problema en la misma caja de revisión los dejó sin luz por dos días. “Los dueños de los negocios perdieron un buen dinero”.
Miguel Zea, inspector de la Empresa Eléctrica Quito, dijo que ayer se removieron los cables electrocutados en una área de 4 metros lineales. Hoy, el Fondo de Salvamento realizará la repavimentación del área afectada. “Todo volverá a la normalidad”.
Los peatones han sido también afectados. María Rosa Saltos, madre de familia de 27 años, empujaba un coche en el cual llevaba a Emilia, su hija de 2 años.
Ella tuvo que sortear los obstáculos de la vereda. Con mucha dificultad logró pasar entre los obreros y las herramientas.
En medio de escombros, tierra y cables, que se encontraban regados por el suelo, se dio modos para avanzar con su hija.